Walo Crespo: Dinamita Pura

El taller de Chucho Cairoli fue nuevamente el escenario para una entrevista de Sólo Rock. En esta oportunidad la charla fue con Walo Crespo, explosivo batero actual de Motosierra, Los Rockadictos y Los Bufarrones y con una larga lista de bandas en las que intervino. Los temas tocados fueron varios, lo que tiñe este reportaje con distintos matices en las declaraciones de uno de los bateros más representativos de la escena under local.


SR: Contanos un poco las bandas en las que estuviste.

Walo: Empecé por el año ’91 – ’92 cuando nos juntábamos con mi amigo el Sejas (guitarra de Los Hombres Mosca, futuro Cosa de Venus, y Bufarrones) a tocar rhythm and blues. Teníamos un vecino que tenía un vinilo de Días de Blues y nos lo había copiado en un cassette. Pirábamos con eso, con Pappo’s Blues, los Rolling Stones de la primera época. Después de eso integré una banda que ya estaba formada que se llamaba Los Granos, allá por el ’94, con la que hacíamos una onda grunge. Ensayábamos en la casa de Marcelo Cross. Por el ’96 el bajista de Cross se va para España, y el baterista no sé qué fin llevó, y Marcelo nos invita al bajista de Los Granos y a mí a integrar una nueva formación de Cross. Ahí toqué unos tres años, hasta que Marcelo se va para Buenos Aires. Allá por 1997 formamos  Luisa Lane, con Carlos de Los Granos y Marcos en el bajo. Justamente por esa época es el último show de Los Chicos Eléctricos, por el ’99, y después del show nos encontramos en el baño de Perdidos en la Noche con el bajista de Los Chicos, Gabriel Barbieri, y ahí decidimos formar una banda. Y el martes de la semana siguiente nos reunimos en la casa de él con Luis Motosierra y ahí formamos Motosierra. Dos meses después llamé a Marcos para que cantara. A principios de los años 2000 conformamos un power trío, Andy Adler & los Coronets Gold, con Andy, Gabriel y yo. Con un EP que nunca vió la luz pero quién te dice, no se edite en algún momento. Y también toqué el bajo en otra banda, La Cosa de Venus, garage rock editado en un simple de un sello español. Luego por el 2007, mientras Motosierra se separa porque Marcos se casa y se queda en Brasil, estábamos tocando unas canciones con Nico Barcia de lo que sería su futuro disco solista. Ahí se integra Andy Adler y al bajo pasa Iván Krisman, y formamos una banda como para hacer un soporte musical a las ideas de Nico. Hicimos una especie de disco, que se llama Rengo Con Nike, y después surgieron canciones nuevas que fueron integrando el repertorio de Hotel Paradise. Paralelamente, por el 2006 Los Rockadictos se quedan sin baterista, y me convocan para tocar con ellos hasta el día de hoy.

Chucho: Hablá bien de nosotros (risas).

Walo: También en ese mismo período fue la vuelta de Cross, e hicimos varios shows hasta el 2010.

Chucho: No te olvides de Los Bufarrones.

Walo: Sí, es una banda alternativa que tenemos con Marcos y con mi querido amigo el Sejas, que fue con el primero que toqué algo en mi vida.

SR: ¿Cuál sería la característica que destacarías de tu estilo de tocar?

Walo: Mi estilo de tocar lo podría definir como…

Chucho: …bajarle el hacha (risas).

Walo: Ponele. Es un toque fuerte, con una técnica aprendida de ver videos y escuchar discos: soy autodidacta, jamás fui a una clase de batería. Durante muchos años aprendía mirando como otros tocaban, por ejemplo The Song Remains The Same, de Zeppelin. No sé que estilo tengo, un estilo personal y desprolijo, quizás. Muy inspirado en el baterista de Black Sabbath, Bill Ward. Un baterista que me influenció mucho fue Dale Crover de los Melvins, o Dave Grohl de Nirvana.

SR: Podemos decir que le imprimís tu sello a las bandas con las que tocás.

Walo: Sí.

Chucho: Sí (risas).

Walo: Le pongo mi sello, soy bastante intenso y siempre me gusta salirme con la mía (risas).

SR: ¿El batero no debería ocupar un lugar distinto sobre el escenario?

Walo: Sí, el baterista debería estar adelante y el cantante atrás (risas). Eso lo dije siempre, pero bueno… No, depende de cada banda. En un concierto de los Melvins que vi en el 2008 en Niceto, no sólo Dale Crover sino que estaba el baterista de Big Business, tenía las dos baterías armadas adelante. Estaba el bajista en un rincón en el fondo del escenario y King Buzzo estaba en el otro rincón. La mejor banda que vi en vivo en mi vida fueron los Melvins en Niceto.

SR: ¿Qué significa Motosierra para vos?

Walo: Estoy tocando en Motosierra hace 20 años, o sea que es casi la mitad de mi vida. Hay gente que a las bandas le llaman proyecto; Motosierra para mí es parte de mi vida, es mi vida. Vivo con Motosierra desde hace 20 años, y creo que me voy a morir con Motosierra.

SR: ¿Cómo definirías a Motosierra?

Walo: Probablemente debe ser la continuación o de las últimas bandas que agarraron el lado más salvaje y crudo del rock and roll y lo trataron de llevar a un punto más alto, hacerlo lo más extremo posible. Tratando de tocar bien, porque había bandas que no tocaban bien y siguieron siendo extremas. Motosierra podés catalogarla de extrema pero a la vez es una banda divertida, que de repente otras no lo son. Entonces te divertís, podés bailar, escuchar una música muy fuerte. Es impredecible Motosierra, podés tener una noche light como podés tener una noche muy heavy. Todo ese dinamismo que se crea forma parte de cómo esté Marcos esa noche, que es el dínamo de todo esto.

SR: Eso se mantiene en Motosierra a pesar de los 20 años y de los cambios de integración.

Walo: Sí, se mantiene. Los integrantes van pasando y van aportando. Nos queremos todos como una familia, va más allá de una amistad. Se comparten ciertas cosas que ni siquiera se da con un amigo, hay momentos de intimidad que solamente se dan arriba de un escenario o adentro de un estudio o en una sala de ensayo.

SR: ¿Cómo es la dinámica musical entre Marcos y vos?

Walo: Es un tira y afloja. Es tenso. Y esa tensión lleva a hacer ciertas cosas. Por momentos es tenso y por momentos es laxo.

SR: Capaz que es parte misma de la esencia.

Walo: Eso lleva también a un dinamismo, te da una forma de crear canciones o de hacer shows distintos. Pero básicamente esa tensión es lo que nos mantiene con vida, también.

SR: ¿Qué pensás que significa Motosierra para el rock nacional?

Walo: Debe ser un grano en el culo. Primero que nada, el rock nacional es espantoso. Las pocas veces que aparecimos y tuvimos nuestros 15 minutos de fama, también fue pain in the ass. En el Pilsen Rock me acuerdo que nos fumigaban todo el tiempo, nos tiraban humo onda “váyanse a la mierda ya”.

SR: ¿Qué significan Los Rockadictos para vos?

Walo: ¡Mis hermanos! Lo que yo no puedo hacer con el resto de las bandas y con el resto de mi vida, lo puedo hacer con Los Rockadictos. Mis hermanos, Sapo y Chucho, me permiten hacer lo que yo quiero tocando la batería. Eso me hace muy feliz, ellos me hacen feliz. Mirá cómo te dejo (dirigiéndose a Chucho).

Chucho: Plata, no (risas).

Walo: También me dan dolores de cabeza. Hemos creado ritmos distintos.

SR: El toque es distinto.

Walo: Muy distinto, nada que ver con lo que toqué alguna vez en mi vida.

SR: Eso no te saca tanto de tu estilo sino que te permite hacer otras cosas.

Walo: Me permite ser otro Walo.

SR: ¿Y cómo es ese otro Walo?

Walo: Ah… ese otro Walo es uno que puede hacer ritmos primitivos, por ejemplo, que jamás hubiese hecho en alguna otra agrupación que integré. Chucho me enseñó gran parte del shuffle y batidos, porque el Chucho también es baterista. Aprendí mucho con estos energúmenos. Sapo que es tremendo bajista y Chucho tremendo guitarrista.

SR: La propuesta de Los Rockadictos también es un poco al margen de lo que es el rock nacional.

Walo: Va por otro lado, más con raíces rockabilly. También es bastante más podrido que un rockabilly clásico, sucio y desprolijo. Más por un lado del Reverendo Horton Heat pero sin ser tan dulce, es más oscuro pero también divertido. Oscuridad divertida, eso me gusta.

SR: Hablábamos con Chucho la otra vuelta: ¿cuánto hay de rock and roll en el rock nacional?

Walo: Yo manejo mucho durante el día y pongo la radio a ver qué pasa. Y la verdad que el rock nacional radial es pop; el formato rock lo da que tiene una batería, un bajo y una guitarra. Primero que nada, ahora la gente llama proyecto a las bandas. Tienen un proyecto, no tienen banda. La banda eran cuatro amigos que se juntan en un garaje a tocar, divertirse, disfrutar y hacer lo que ellos quieren. Un proyecto ya va con un destino de ver si hay un éxito comercial. Una estructura en donde hay una canción pop, donde se ve si es radial y si puede pegar. Son intenciones distintas. El rock and roll, para mí, es una cosa visceral de una cantidad x de personas que se juntan a tocar, y que lo que les salga sea del corazón y no pensando en un éxito comercial pensado a futuro, creo yo.

SR: En el under eso se da, por lo menos en parte.

Walo: Sí en parte, y en parte no. He visto muchos proyectos que son under pero están con un fin. O sea, todo el mundo la quiere pegar, que te pasen en la radio. Me encantaría y le encantaría a todo el mundo, creo yo. De ahí a hacer un proyecto under para ver si la pegás en la radio y ver si te descubre Santaolalla… no sé.

SR: Capaz que el problema está en la pérdida de la honestidad de la propuesta.

Walo: En el fin de la propuesta. ¿Qué querés con la música? ¿Querés expresarte, decir algo o querés pegarla y no laburar, dejar las 8 horas y pasarte dentro de un estudio? Que está buenísimo, re válido. Pero la cuestión es hacia dónde querés ir con eso.

SR: Y si dejás cosas por el camino.

Walo: Claro, y qué estás dejando.

SR: Motosierra tuvo éxito a nivel under fuera de fronteras.

Walo: Éxito entre comillas, jamás a nivel comercial. Vendíamos discos en las giras en Brasil o en Argentina, pero en un nivel muy under, no vendimos 25 mil discos. Hubiésemos querido, nos hubiera encantado. Capaz que tampoco dimos con la maquinaria para que lo permitiera, o no tocamos las puertas indicadas. Creo que tampoco nos importaba mucho.

SR: ¿Qué te parece que le está faltando a la escena de rock local?

Walo: Para mí el rock es una cosa y el rock and roll es otra.

SR: A ver, definime ambos.

Walo: El rock es un proyecto que tiene formato rock, bajo, guitarra, batería y voz, que pueden hacer unas canciones estilo rock. Rock and roll, para mí, es la esencia de todo eso. Tenés que ir a la raíz de lo que fue ese estilo de música. Vos ves que MC5, los Cramps, Pappo, eran gente que, más allá de que necesitaban un mango para seguir girando y comer, hacían lo que ellos querían. Primero lo que a mí me gusta, y después, si al público le gusta, ok. Elvis, que fue un producto pero de otra época, sí tenía un corazón y un alma, y no era un proyecto a ver si la pegaba o no.

SR: ¿Entonces el que termina vendiendo el alma al diablo no es el rock and roll sino el rock?

Walo: Probablemente. Ahí nos ponemos filosóficos y podemos ahondar mucho sobre eso. Capaz que sí. Creo que en la esencia de las personas está la cosa: para dónde querés ir, si querés vivir de la música, dónde estés, en qué tiempo y dónde estés viviendo. Nosotros estuvimos el año pasado en Europa y te das cuenta que los locos siguen teniendo hambre de rock and roll. Acá, por ahí, una persona te va a ver y después se va a ver trap.

SR: El rock and roll nace como diversión pero rápidamente se transforma en rebeldía, ¿no?

Walo: Se transforma en rebeldía y el rock and roll es un caballito de batalla, es un burro de carga, le ponen todo arriba de él. En base al rock and roll tenés revoluciones, droga, sexo, o un nazi que te canta en una base de rock and roll.

SR: Como está el mundo hoy, ¿desde qué lugar te parece que el rock and roll puede estar aportando algo con esa rebeldía?

Walo: Ahora no sé. De rebeldía no creo que esté aportando nada. Esa rebeldía quedó para los veteranos, los jóvenes no escuchan rock and roll.

SR: ¿Tampoco son rebeldes?

Walo: Por ahí tienen una rebeldía pero distinta.

SR: ¿Los adormecieron?

Walo: Para mí que los llevaron para un lado al que los grandes intereses mundiales los quieren llevar. En algún momento, todavía en los ’90 en la época de Nirvana que fue el último atisbo de rock and roll masivo, las discográficas lo único que querían era ganar dinero, no les importaba la banda. Pero ahora crean productos y crean artistas y crean cantantes, y está cantando por un sueño. Antes los cantantes se hacían arriba de un escenario, no se hacían en un programa de televisión.

SR: Quizás el rock and roll ahora está ocupando el lugar que siempre quiso ocupar, fuera del mecanismo de la sociedad, donde puede ser más honesto.

Walo: Lo que pasa es que las nuevas generaciones (hay excepciones, y quiero creer que las hay) a las bandas las tratan de proyecto. ¿Cómo vas a tratar a tu banda? Tu banda es tu corazón, le estás dejando tu alma, todo lo que querés, todo lo que pensás. Es tu banda, no tu proyecto. ¿Qué proyecto? Proyecto es hacer este edificio de mierda que hicieron ahí enfrente, que tiraron una tremenda casa divina, de época, e hicieron esa porquería. Eso es un proyecto edilicio. Proyecto es otra cosa. Y ahora está inundado de proyectos y no inundado de bandas.

SR: ¿Hay bandas?

Walo: Hay pocas, pero todavía quedan.

SR: La mayoría de las bandas under que surgieron en los ’90 han quedado por el camino, y Motosierra es como un sobreviviente.

Walo: Claro, porque nos encanta lo que hacemos. Esa es la diferencia. Está bueno pegarla, pero si no la pegás te podés seguir divirtiendo. Nosotros nos divertimos haciendo lo que hacemos. Y lo hacemos también con Los Rockadictos. Disfrutamos tocar entre nosotros y tocar para la gente. Se disfruta un ensayo, el momento creativo cuando no hay nada y de repente tenés una canción. ¿Cómo es eso? Estás moviendo aire a través de un instrumento. Es la nada, no lo podés ver, solamente lo podés oir y lo podés sentir físicamente.

SR: ¿Qué está haciendo Motosierra para lo que queda del año y el que viene?

Walo: Estamos ensayando, sacando temas nuevos. Tenemos varias sorpresas que no podemos sacar porque no podemos tocar. Nos han ofrecido para tocar últimamente, pero las condiciones son paupérrimas. Espantosos los arreglos entre lo que quieren hacer los lugares y los músicos. Es un aprovechamiento inescrupuloso. Preferimos no tocar por el momento hasta que se den las condiciones. Y en lugar de hacer álbumes, vamos a empezar a tirar canciones, hacer EPs, y dar sorpresas. No se puede decir más, pero estén atentos a las redes sociales.

SR: ¿Algo que quieras agregar?

Walo: Sí, sigan escuchando rock and roll, no se dejen tocar el culo por nadie, respétense y respeten a los demás.

Ariel Scarpa