Varo Coll, baterista de Ácido, la primera banda de heavy nacional, nos cuenta sus anécdotas como sólo él sabe hacerlo.

A través de la historia, son muchísimos los shows o festivales que deben ser recordados. El de Salto allá no recuerdo por qué año, los Montevideo Rock (creo que hasta el II), los Pilsen (creo que hasta el II) y muchos más; son unos 70 años o más de rock. Y me alegra y quisiera que éstos en particular, sean recordados como los de la fermental generación de los ’90 y todo lo que explotó a partir de eso. Este artículo se trata de los Rock de Acá.

Bueno, supuestamente este artículo iba a salir antes del show. Luego «pensé» y todos van a comentar que hablo así porque son amigos… Preferí esperar hasta que encontré las palabras justas y además profundizando más en el tema de lo que representan que lo que fue el show. En la tinta de mi amigo Ernesto Sclavo y a quien pedí autorización, es que ahí va lo prometido y más:

Sobre comienzos de los ’80 con la dictadura presente aún en Uruguay, todos los jóvenes se empiezan aburrir. A rebelar. ¿Qué carajo de generación me tocó que no hago nada? ¿Y toda esa rebeldía por dónde carajo la canalizabas?, ¿yendo al Estadio los domingos? No, eso ya no. En el mundo estaban apareciendo otros estilos de música.

Hace tiempo que venía masticando y masticando una nota sobre ÁCIDO. Sí, sobre mi banda, ¿y qué? Creo que además de merecerlo, si las cosas no las cuenta uno, ¿quién? Si Santaolalla se hace un documental de mierda diciendo lo que quiere sobre el rock, ¿no puedo yo escribir un artículo de mierda en esta revista? La cosa es que de momento, lo de ÁCIDO quedó en el freezer, pero si arranqué debido a muchos motivos, sobre mi pasaje por X FM 100.3, por las radios en general o los medios de comunicación por los que pasé, etc. Pero no podía dejar pasar FEBRERO por más que me tuviese como uno de los protagonistas.

Sin lugar a dudas, es merecidamente considerada una de las mejores voces del rock, amén de que directamente algunos lo tengan o lo conozcan como «the voice of rock». Bautizado así por Glenn Miller, este enorme cantante y bajista tiene en su curriculum nada más ni nada menos que pasar por bandas como Deep Purple, Black Sabbath y Trapeze, además de miles de colaboraciones y proyectos.

La verdad, en lo personal, ese documental de «Rompan todo» deja muchísimo que desear. Al parecer SantaYOlalla necesitaba contar su vida y la adornó con un poco de historia salpicada, con bandas que trabajó o le gustan, sus producciones y sus amigos y un buen rato de hablar sobre sus bandas. Esto va más allá de muchas cosas, de haber ÉL precisamente olvidado pequeños y enormes detalles de lo que pasó en la latinoamérica a la cual se refiere.

Entre tantas frases que escupía al día, momento tras momento, creo que sin duda el nombre de la nota es para mí, la más representativa. Tanto en serio como en joda, esa era su principal respuesta en el final de una charla, por ejemplo. Creo que había un 90% de que había que irse (del país) y el otro 10% tal vez dicho como respuesta a alguien sobre algo sin prestarle mucha atención.

Recibo un mensaje de guasap que me dice «muy buena la nota», y ahí comenzamos con Mundy Epifanio un dialogo sobre el recuerdo de aquel show en Montevideo, y me pareció fundamental entrevistarlo para que contara un poco también su historia y sobre todo, cómo fueron esos comienzos de Riff. Muchas veces los músicos no sólo necesitan un manager para que les agende toques, o les consiga groupies, o droga o la pendejada que se les pueda ocurrir. Muchas veces ese manager se convierte en parte fundamental de una banda. De sus movimientos, de su accionar, de su visión de futuro. Es como una pieza de un artista integrado por muchos cerebros que empiezan a modelar una cosa, un producto, una propuesta. ¿Viste cuando dicen «el quinto beatle»…? Bueno, tal vez algo de eso. Ese otro. Que no es lo mismo que cuando están sólo por dinero.

…el dicho que con el ejercicio la mente se acostumbra es cierto, hace tiempo no lo hacía. Me encanta escribir, siempre me gustó, e hice hasta un Curso de Periodismo cuando la carrera no existía. Llegué a publicar a modo de free lance en La Mañana, Últimas Noticias y El País. Artículos sueltos. Mis primeras notas fueron increíblemente a enormes artistas. Ruben Rada, el flaco Spinetta, Pappo, Pedro y Pablo, Osvaldo Fattoruso, Javier Martínez, Artigas Silvestro de Siddhartha y alguno que se me olvida (hasta al Director del Centro Krishna en Uruguay, pero eso son $ 20 aparte… porque lo que hicimos con algunos amigos luego por ahí fue divertidísimo…).