Voces Retro: Graf Spee (1990)

Rockportaje a Graf Spee (1990)

Graf Spee es uno de los grupos de rock nacional que más se preocupa por su puesta en escena; y además viene realizando un trabajo importante para la difusión de su material. Como ejemplo de esto, pueden leer una nota de una página completa que le dedica la revista Metal, de Argentina.

El grupo se compone en la actualidad por Víctor Rueda (voz, 24 años), Luis Linfa (guitarra, 28 años), César Orengo (guitarra, 23 años), Luis Spósito (bajo, 28 años) y Diego García (batería, 26 años). Y así hablaron:

Sólo Rock: Hagan un poco de historia.

Luis: Hace tres años, más o menos, arrancamos con Víctor, Luis Spósito y otro batero. Después entró Diego en batería y ahora el último en integrarse a las filas es César, en guitarra.

SR: Por acá pasaron algunos personajes.

Luis: Sí, estuvo Carlos Quintana, actual Delanuka.

Diego: Sí, hacía música visceral (risas).

SR: ¿Por qué se deciden por el thrash?

Diego: Bueno, nosotros hicimos un grupo que obedece a distintas corrientes, con gustos personales de cada uno de los integrantes. Hay muchas influencias y pasajes que pueden obedecer a una corriente y el siguiente pasaje puede obedecer a otra, y no tienen nada que ver una con otra. Como promedio general se podría decir que se incursiona en el trash. Pero hay una cantidad de fusiones como el jazz, música progresiva, hardcore… y es eso. Ahora estamos tratando de incursionar en lambada thrash (risas).

Víctor: Estamos dentro del metal, y la música más fuerte dentro del metal es el thrash o el death metal. Y nosotros a nuestro disco teníamos que meterlo dentro de alguna corriente para poder venderlo.

Diego: También es la gente la que te pone el rótulo.

Víctor: El primer tiempo de la banda fue comparada con Venom y hacíamos black metal. Ahora ya nos escucharon mejor y el concepto cambió. En realidad, no tratamos de encasillarnos en nada; sí dentro del metal.

SR: ¿Qué gente los va a ver?

Víctor: Si es un espectáculo sólo de metal, nos van a ver metaleros, es obvio; y la edad, no menos de 15 años hasta la edad nuestra. Y después en El Circo o en Parque Rockdó era otro público que después se acercaba interesado en la banda.

SR: ¿Son los más duros?.

Víctor: No sé.

César: Eso lo tiene que decir la gente.

Víctor: Seguro. La dureza no va en la música solamente, sino en la idea general que tenga la banda. Es como decir “yo soy hombre porque le pego a unos cuantos”. En esto es igual.

Diego: En estos momentos la preocupación mayor de nosotros no es ser más duros, rápidos o agresivos, si no tratar de perfeccionarnos lo más posible para llegar a un buen nivel como grupo profesional, que acá prácticamente no existe.

SR: ¿Por qué no hay profesionalismo?

Diego: Todo parte de una base de que hay una falta de conciencia a nivel particular de cada músico, porque el 70% de los músicos que andan por ahí no están capacitados para subir a un escenario. Eso ya es un principio para que el producto final no sea bueno. Entonces, partiendo de la base de que uno no se mentaliza individualmente en que cada integrante del grupo se tiene que superar, no hay avance. Todos los integrantes son fundamentales y deben funcionar por igual.

César: Para mí hay un problema de consumo. Acá hay tres millones de habitantes. La juventud es muy poca, entonces no hay consumo. Por ejemplo, Jaime Roos, un tipo super popular es bien difundido. ¿Cuántos discos vende? 4000 ó 5000, y es popular. Entonces, ¿qué dejás para las bandas nuevas?.

Víctor: Cuando nosotros estuvimos en Brasil vimos que es muy diferente, y ser profesional no es ser buen o mal músico, es todo. Y como ser, allá hay actuaciones todos los fines de semana, y ensayan todos los días, y pueden vivir de eso, por lo menos las bandas que han llegado a nivel más o menos bueno. Y hay productoras. Hay una buena infraestructura detrás de cada banda.

César: Otro problema es que para grabar rock hay un solo sello acá, y ningún otro se la juega. Entonces no hay competencia, y las condiciones que te ponen para grabar son desastrosas. Te dan 40 horas para grabar un tema. Al final al grupo le dieron 60 horas, y que salga como salga. O sea que ni siquiera tenés posibilidades de grabar un buen disco.

SR: ¿Cómo les quedó el disco?

Diego: Para lo que es el medio, estamos conformes. No es la idea que teníamos, pero…

Víctor: Seguro. Lo que pasa es que vos llegás a un estudio y te dicen “tenés esto para laburar”, y recién ahí empezas a carburar cómo podés grabarlo. Pero estamos conformes.

César: Aparte, con el técnico de grabación te conocés en el estudio, y capaz que de lo que vos hacés no sabe nada. Y en otras partes los grupos se disputan los ingenieros de sonido, y cada uno tiene su curriculum.

Diego: Leyendo los discos, hay un cargo que dice productor, y el productor se encarga de buscar el ingeniero que la banda precisa y es el que define el sonido del disco. Pero son gente especializada.

SR: ¿Cómo les fue después del disco?

Víctor: Lo que pasa es que el disco todavía no salió. Salió el cassette, y a nosotros el cassette no nos sirve para nada. Porque no es ni siquiera lo que nosotros pretendíamos. Es un demo, porque no tiene ni siquiera los nombres nuestros. El cassette tendría que haber salido con las letras, información técnica.

Diego: Porque el acuerdo fue así.

Luis: Además el cassette salió y nosotros no sabíamos que salió.

Víctor: Sí. Nosotros estábamos en Buenos Aires, que yo había ido para el corte del disco allá y llego y no estaba el máster. Le digo “escúchame, acá no saben nada. Me dijiste que estaba todo arreglado”. Y el loco me dice “mirá, lo que pasa es que el master no lo pude mandar, pero mirá que ya te sacamos el cassette acá”. Entonces vine, lo vi, y les dije que había que retirarlo de la venta, y cero bola. Todavía lo están vendiendo.

Diego: ¿Cómo pretendés ser profesional así?

Víctor: Se habló de que el disco salía en diciembre, a más tardar. Les dije eso y se agarran de que salió el cassette. Y el último cuento es que no aceptaron en Argentina, entonces no pueden sacar el disco. Entonces ahí ves quién es el profesional. El peor disco brasileño suena mejor que este cassette. Entonces nosotros no podemos competir en ningún lado. Y la verdad es que el segundo disco si no lo grabamos en Brasil, no lo grabamos en Uruguay. Porque es al pedo; es solamente decir “pah, mirá, tengo un disco».

SR: Todo esto que dicen puede ser pesado.

César: Lo que pasa es que ningún grupo se anima a decirlo.

Víctor: Nosotros no le estamos dando palos a Alfonso Carbone, le estamos dando a la empresa Palacio de la Música.

Diego: No estamos diciendo “Carbone nos hundió”. Estamos diciendo que la manera de trabajar del Palacio es la siguiente y es para todos igual.

Luis: Nosotros a Carbone le estamos agradecidos.

Víctor: El hace fuerza por nosotros.

Luis: Acá lo que no hay es una protección para el artista. Viene cualquiera de afuera y toca.

César: Tal vez con el nuevo Intendente, Tabaré Vázquez, la cosa cambie.

Diego: Hay lugares que están desaprovechados.

Víctor: El teatro del Cerro, que está destruido.

César: Sí, ahora crían animales, es una chacra.

SR: ¿No se puede presionar para que esto cambie?

Diego: Lo que pasa es que la gente que trae grupos de afuera son multinacionales, y con guita se silencia mucha gente. Así que eso no creo que cambie. El capitalista trae un artista y hace lo que quiere con él.

Luis: Pero todavía te calentás, porque entre los auspiciantes aparecen la Intendencia, y todos los uruguayos quedan afuera. Encima fuimos como unos giles, pagamos la entrada y nos comemos un garrón.

César: Y con la ley de radiodifusión, cortarles la cabeza si no la respetan.

Luis: Si vos traés algo de otro país, tenés que pagar un impuesto. Entonces, si traen músicos de afuera, que se les cobre y así se le da apoyo al músico uruguayo.

Jugoso Rockportaje; y polémico. Otra demostración más de que los uruguayos piensan y tienen sus muy buenas ideas propias.