Tremendo show brindado por las tres importantes bandas de nuestro medio en la noche del viernes. Un muy buen lugar como es Midas, complementado por un excelente manejo de luces y sonido, fueron el marco más que adecuado para el lucimiento de las bandas en cuestión. ¡Y vaya que se lucieron! Tres grandes bandas, tres grandes toques.
Abría la noche el sonido de Pando de Harry y Los Sucios. El punk rock decía presente y se dejó oír fuerte y claro. Al placer adicional de ver el regreso de una banda clave de nuestro pasado rockero nacional, se suma siempre el hecho de ver en la buena forma en que se encuentran. Aportando desde su lugar, apelando a los recursos fuertes de la banda y dejando placer y satisfacción (¡oops!) arriba y abajo del escenario, con excelentes resultados.
El repertorio estuvo jalonado por todos muy buenos temas e interpretaciones, donde hubo lugar para las versiones de “Avril” (Los Estómagos) y “Sobreviviendo” (Víctor Heredia), ya dos clásicos más de la banda. Efectivo desempeño que supo recoger aplausos continuos, cerrando la actuación con una canción dedicada a Gio Pertuzatti, de Despertando Rock.
A continuación sube Bronson y Los Turbios, trayendo la dosis de turbiedad que todos esperábamos. Un sonido diferente en nuestro panorama local, con componentes distintos y muy bien conjugados. Generaron especiales climas, donde la voz de Gonzalo Guido marca a la banda con su sello personal. El aporte de los músicos entra en perfecta conjunción entre todos ellos, transformándolo en algo muy personal.
Excelente presentación que también tuvo el detalle de traernos versiones, en este caso de Sumo (“El cieguito volador”, que retitulan como “Los murciélagos”) y de Los Traidores (“Invierno en la fábrica”), donde se puede apreciar el valor agregado de cómo se integran al estilo de la banda.
Cerrando la noche, Bestia Zen nos iba a dejar la potencia de su show, como es costumbre de la banda. Mucho oficio sobre el escenario, lo que les permite sonar de maravilla, siendo siempre un disfrute todos sus temas. Hay variedad y versatilidad en la propuesta de la banda, lo que permite lucimientos varios, personales y grupales, logrando erigirse en una excelente propuesta, y por ende, con ese mismo resultado para la actuación.
También presentaron un par de versiones, en este caso, con referencias a otros estilos de nuestra música: “Hoy te vi” (Eduardo Mateo) y “El instrumento” (Eduardo Darnauchans), ambas muy disfrutables. Mucho rock, energía y aplausos para coronar un show de alta calidad.
Muy bueno todo lo de las tres bandas: canciones, interpretaciones, actitud, puesta en escena, entrega; todos componentes fundamentales para que una banda sea y suene rock. No se puede pedir más.
Ariel Scarpa