Se viene el 9 de octubre y nuestros entrevistados de hoy, la banda Gualicho, estará presentando su disco Intenso, que fuera lanzado en julio de 2020. Pero no sólo de esta presentación y de todos sus detalles conversamos en esta entrevista, también hablamos del futuro y todos los proyectos de estos pandenses. Emiliano Olivera (voz y guitarra) y Frank Mintegui (bajo y coros) fueron los integrantes de la banda presentes en la nota, quienes junto a Gino Bata (batería) serán los encargados de poner a Intenso sobre las tablas de la Sala Camacuá. Veamos lo que tienen para contarnos.
SR: ¿De dónde viene el nombre de la banda?
Emiliano: Cuando recién arrancamos, no teníamos nombre. En el interín de mandarnos Whatsapp con textos y ver lo que queríamos lograr con el nombre, porque no es sólo poner un nombre a la banda sino lograr una intención, surgió la idea de ponerle Gualicho para que nuestra música lograra engualichar, por decirlo de alguna forma.
Frank: En la charla, una de las cosas que dijimos fue que “vamos a tener que engualichar a la gente para que escuche nuestra música”. Y de ahí fue que salió el nombre.
SR: El logo de la banda también es particular.
Emiliano: Sí. Después de que logramos la idea del nombre, empezamos a trabajar en una imagen, un logo que representara ese nombre. Jugamos un poco con lo que nuestras abuelas decían, de la manito para abajo, “no me engualiches”. Puede ser para atraer o para repeler, son dos conceptos ambiguos.
Frank: Mi familia es del interior, y en el campo es clásica la palabra gualicho. Se usa para atraer algo o para que te vaya mal en algo.
Emiliano: También jugando con el clásico símbolo del rock que Ronnie James Dio hizo tan popular, invirtiéndolo. Al final terminamos muy contentos, porque lo podés agarrar por un lado de repeler o de atraer.
Frank: Si mirás el rojo de atrás del logo, no es un rojo prolijo, es como un rayón de brujería. Queríamos causar ese efecto con ese rojo.
SR: No significa que la banda esté engualichada.
Emiliano: El nombre tiene su peso. Vamos para cuatro años de banda, y los hemos sufrido y hemos vivido con alegría, en cuestiones personales y como banda también. Nos han pasado cosas extrañísimas que se las atribuimos al nombre, y también nos han pasado cosas increíbles.
Frank: La más común, como tener que programar tres veces la presentación del disco. Y cada vez fue coordinar con cada una de las personas, ensayar con los invitados. Todo lo que se armaba para que al final se cayera. Uno lo hace con ganas y con ilusión, pero tenés que estar muy bien parado para decir “la banco y sigo adelante”.
Emiliano: Entendido el concepto de que Gualicho tiene su fuerza propia como nombre y nosotros seguimos ese tren.
SR: ¿Si decimos que son una banda de Pando está bien?
Emiliano: Sí, nos consideramos una banda de Pando, si bien no vivimos en la ciudad mismo, con Frank vivimos en los alrededores. Gino Bata, que se incorporó el año pasado, vive en Montevideo.
Frank: La banda se formó con nosotros dos en Pando.
SR: ¿Influye de alguna manera la historia de Pando y sus bandas de rock en la banda de uds?
Emiliano: Sí influye, no por un tema musical. Si bien nuestro estilo es bastante abarcativo, consideramos que somos músicos muy esponja y que nos gustan diferentes estilos. La banda no lleva un estilo solo, sino que durante su época va hincando el diente en diferentes sub géneros del rock. Pero ni que hablar que esa mochila de la historia del rock en Pando también es una mochila nuestra.
SR: ¿Y cómo influye? ¿Pesa?
Emiliano: No, no pesa para nada. Nosotros tratamos de hacer lo mejor que sabemos hacer y tratamos de que a la gente le guste, entienda y sienta lo mismo que nosotros.
Frank: Nunca estamos pensando que somos una banda de Pando. No es que estamos pensando “somos una banda de Pando y tenemos que…”. De hecho, creo que es un tema que nunca sale. Es más lo que la gente asocia por ser de Pando que lo que nosotros decimos.
SR: La propuesta de la banda es rock, evidentemente. Si es la intención, ¿cuesta diferenciarse de otras bandas de rock nacional en general?
Emiliano: Para nosotros es muy sencillo lo que hacemos, lo hacemos de una forma muy natural. Al ser muy diferentes los tres, al haber vivido cosas diferentes y haber tocado en diferentes proyectos y tener diferentes gustos musicales, cuando nos adentramos en lo que es la banda, no buscamos un camino sino que dejamos que vaya fluyendo lo que es la musicalidad, el sonido de la banda. Con el tiempo va mutando, como todo en la vida, es parte de la energía de cómo las cosas se transforman.
Frank: Cuando uno arma una banda, la idea siempre es no parecerse a todo lo que ya está. Pero tampoco es que estamos pensando en hacer algo que no se parezca, porque el ingrediente de cada uno no permite que nos parezcamos a lo que ya hay. Naturalmente sale un sonido a veces en ciertas cosas pero por la forma de tocar. Para mí, Emiliano tiene una forma muy característica de riffear. Gino tiene vuelos muy propios. En mi caso, por las influencias que tengo de bajo, también. La voz de Emiliano, el tipo de coros que hacemos cuando tratamos de hacer armonías… Eso hace que el sonido no sea tan similar a algunas cosas. Y uno a veces trata también de incorporar ciertas cositas para darle un toque.
Emiliano: Justamente, hablando de Pando, la cuna del rock y del punk de Uruguay, nosotros hacemos temas punk o punk-rock, o tratamos hacerlos, pero no son parecidos a temas que hacen otras bandas. Y no nos ponemos a pensar, lo hacemos de la mejor forma que podemos y sentimos, pero somos concientes que no nos parecemos a otras bandas.
SR: ¿Les parece que existe una movida de rock o que las bandas están dispersas?
Emiliano: Ahora está todo bastante complejo con este tema de la pandemia y los cortes de los shows. Los grandes festivales y escenarios influyen mucho, tanto en las bandas que están metiéndole garra y cabeza a lo que hacen como en las que ya tienen un marco de público importante. Yo creo que lo que es la industria del rock uruguayo ha quedado medio en un limbo, que tengo la esperanza que con el tiempo vaya cambiando.
Frank: Hay muchos factores. Por un lado está lo que el Estado trata de hacer y adónde quiere llevar las cosas, también está lo que viene de afuera, las nuevas tendencias musicales. No hay bandas de rock jóvenes. No hay bandas nuevas de gurises que quieran agarrar un bajo, una guitarra y una batería y salir a tocar; están para otra cosa, para otro género. Te da un poco de miedo, porque el rock está pasando a ser el tango. Cada vez somos menos, pero uno tiene que seguir haciendo lo que le gusta y tratar de meterle ganas a eso. Igual hay una movida que, si bien tiene menos fuerza que otros géneros hoy en día, los que son, están más potenciados, están más unidos.
Emiliano: Y también buscando la profesionalización, tratar de hacer mejores canciones, mejores clips y tratar de mejorar cada proyecto. Eso está bueno, porque si otro proyecto lo puede hacer, nos beneficia a nosotros así como nosotros beneficiamos al otro, aunque no sea un beneficio directo.
SR: Hablemos del disco Intenso. ¿Cómo lo definirían?
Emiliano: El nombre lo define, realmente. Con Frank desde el inicio de la banda fuimos la cabeza y el motor del proyecto; somos los dos bastante locos, muy pero muy diferentes. Esa diferencia hace que encontremos un punto medio y entendamos qué es lo que quiere Gualicho, que es una entidad aparte de lo que somos nosotros. Cuando empezamos a componer las primeras canciones y pasamos a ser un power trío, nos juntamos veintialgo de días y compusimos 30 canciones (ya veníamos con algunas composiciones hechas y otras las hicimos en el momento) para sacar un disco, porque nosotros queríamos salir con un disco. No queríamos salir ni con un demo ni con un EP ni con un sencillo. La banda quería salir con un disco, y así fue el trabajo, bastante intenso desde el principio de las composiciones hasta que logramos plasmar el material en formato físico y digital.
SR: 30 temas son muchos.
Frank: Tenemos tantos temas que están buenísimos, para nosotros, pero no entraban porque no encajaban con la línea que queríamos en el concepto que teníamos para ese disco. Queríamos que el disco fuera conceptual y manejar temas que se pudieran integrar. Tampoco quisimos forzar ningún tema para que entrara. Si el tema es así y se compuso así, queda así.
SR: O sea que la intensidad del disco estuvo en la previa.
Emiliano: En la previa y en la grabación también. Fueron muchas horas de muchos días de muchos meses de trabajo. Desde que entramos al estudio hasta que se salió, logramos hacer el disco en 9 meses. Está considerado que una banda profesional, con un sello que lo sigue, demora 9 meses en grabar un disco. Nosotros logramos ese objetivo.
Frank: Aparte, los cambios que tuvimos que hacer en todos los sentidos. Cuando empezamos a grabar las guitarras, nos dimos cuenta que queríamos cambiarle el sonido. Él tocaba con pedales digitales, y en un día consiguió ocho pedales para lograr el sonido que buscábamos, que no era digital.
Emiliano: Y también la búsqueda de sonido, de aprender a usarlos, de encontrar su sonido. Los dos de las cuerdas, consideramos que tenemos nuestro sonido en el piso más allá de lo que es el instrumento.
Frank: Nosotros queríamos que el disco quedara grabado con un sonido potente, para el que muchas veces tenés que hacerlo por capas, pero a su vez queríamos poder reproducir ese sonido, después. Entonces, cada uno de nosotros tocó en dos equipos, salimos estéreo, para conservar la gama de sonidos.
Emiliano: Todo eso fue un aprendizaje que lo hicimos en el estudio con Intenso, que fue nuestra escuela de banda. Gracias a este disco aprendimos qué es lo que queremos y cómo queremos sonar. También tenemos que agradecer a Antonio Acosta, el maestro Tabárez. Nosotros éramos los jugadores, pero teníamos ese DT que la verdad que es un genio. Entendió el concepto de lo que queríamos y fue para adelante a sacar el trabajo. Gracias a eso, hoy nos encontramos grabando otro disco.
Frank: En esos 9 meses hicimos el video clip de uno de los temas sin tener la línea original del tema, que no es fácil. Complicadísimo. Hay un trabajo intenso ahí también. Por otro lado, nosotros no queríamos sacar el disco sólo digital, queríamos sacar el disco físico. Eso implica hablar con la persona que hace el arte, hacer todos los permisos en AGADU, sacar el permiso para imprimir, porque cada disco que vas a imprimir, AGADU te lo cobra. Hasta tenés que llevarlo a una imprenta para que te ponga el nylon y quede cerrado. Y antes de que saliera el disco, subir a todas las plataformas para que ya estuvieran el día del estreno.
Emiliano: Mucho pienso y mucha cabeza…
Frank: Cuando en realidad uno no se dedica a esto.
Emiliano: Somos músicos, productores, manager, editores; todo lo que te imagines que está dentro de la música. Eso no es algo que nos pase sólo a nosotros, ni que hablar.
Frank: El problema es no caerse en el proceso, tener la fuerza y la voluntad suficiente.
SR: El disco salió en julio del año pasado. ¿Hay una distancia en lo artístico entre ese final de la banda editando el disco y la presentación que harán ahora?
Emiliano: Hubo muchos cambios desde que sacamos el disco hasta hoy en día. Uno de los cambios más grande fue la incorporación de Gino en la batería, que ingresó en diciembre de 2020. Fue un cambio que realmente le dio otra musicalidad a la banda. Es un músico que tiene 30 años tocando en muchos proyectos, y es muy querido en el ambiente. Estamos muy contentos de que él haya ingresado, porque nosotros aprendemos de él y él de nosotros. Ese ingreso de Gino hizo que quisiéramos entrar al estudio a grabar de nuevo. Ahí se nota el concepto de los cambios que vienen para la banda.
Frank: Adrián, el baterista anterior, era excelente. Está todo bien con él, pero estaba muy influenciado por el metal. Lo que lograba eso era que la banda fuera más rígida en el sonido. Cuando entró Gino, llevo los temas a su forma de tocar, mucho más volada, más abierta. Es como si hubiera agarrado una foto blanco y negro, y la pintó. Le dio ese color que a nosotros nos permitió movernos de otra forma. Adrián era un batero que tocaba con metrónomo, y Gino al no usarlo como que te permite esa libertad de poder tener esa espontaneidad, que si querés mirarte y esperar un segundo para todos cerrar juntos, lo podés hacer. Eso fue genial, y llevamos los temas más al rock, que era lo que estábamos buscando, también.
SR: A nivel compositivo como que hay un cambio, entonces.
Emiliano: Sí, lo hay. Es inevitable.
Frank: Es para bien, estamos contentos.
Emiliano: Tampoco sufrimos ese duelo. Adrián decidió irse de la banda sin pelearnos. Entendió que el concepto de la banda incurría en mucho tiempo y no podía seguir el tren de lo que nosotros queríamos. A Gino lo conocía de hace muchos años. Después de que entró, me dijo: “Yo sabía que iba a tocar en Gualicho. No sabía cuándo, pero lo sabía”.
Frank: Hablamos con Gino cuando ingresó para sacarle algunas responsabilidades. Generalmente manejamos nosotros la banda, porque sabemos que si le ponemos la locura nuestra a otra persona, no sé si nos sigue el viaje. Tenemos la misma locura los dos.
Emiliano: No quita que a veces tengamos discusiones y no nos pongamos de acuerdo hasta que… es ahí.
Frank: Pero nunca llegamos al punto de discusión fea.
Emiliano: Una vez sola. Estábamos grabando el disco Intenso y el solo del tema “Mi verdad” -Frank no había ido ese día- no era el mismo solo que teníamos en la maqueta. En la sesión siguiente, cuando lo escucharon, a ellos no les gustó… y a mí me encantaba. Ahí empezamos una discusión que nunca habíamos tenido con Frank, de estar enojados. Fuimos al estudio en un momento de quiebre para la banda, en la mitad de una grabación donde realmente podía salir todo mal. Nos sentamos y empezamos a trabajar el solo nuevamente, y cuando terminamos, no podíamos creer lo que habíamos hecho. Realmente, teníamos que hacerlo de vuelta.
Frank: Es el concepto del punteo en sí, qué es lo que nosotros queríamos representar con ese punteo. Somos muy hincha huevos con eso. Queremos transmitir algo musicalmente que a veces no lo podés expresar con palabras. Tiene que representar algo. Entonces, no era tan sencillo. En el 100% de Intenso estuvimos de acuerdo los tres. Era algo que queríamos mantener desde un principio. Yo quería que la banda fuera un grupo humano que hiciera cosas que me gustan, pero conservar el espíritu humano.
Emiliano: Eso lleva a algún intercambio de ideas por pensar diferente.
SR: Ahí se crece.
Emiliano: Ni que hablar. No sólo en los aciertos se crece, se crece en los errores, también.
Frank: Hay que aprender a ceder mucho, escuchar lo que te dice el otro.
Emiliano: Por eso decimos que este disco, para nosotros, fue una escuela. Consideramos que la evolución que nos marca este disco la vamos a ver reflejada en nuestro próximo trabajo, y espero que la gente lo vea así.
SR: ¿Cómo tienen pensada la presentación del disco?
Emiliano: La presentación la venimos pensando, diagramando y craneando desde el año pasado. Desde el día que sacamos el disco ya teníamos pensado cómo queríamos la presentación. Va a ser nuestro mayor show, individualmente como músico, y creo que como banda, va a ser una locura.
Frank: El show tiene todo el disco, presentación de algún tema nuevo del próximo disco, algunos covers que tienen que estar porque son parte de lo que nosotros hemos hecho, invitados no solamente grandes sino que va a haber algún invitado pequeño…
Emiliano: En altura y en edad (risas).
Frank: Fuegos artificiales, pantalla gigante, luces. Va a estar completo, hasta con cambio de vestuario y de instrumentos.
Emiliano: Nos enfocamos en intentar hacer un show internacional dentro de lo que podemos hacer y lo que soñamos hacer. El grupo de trabajo ronda las 10 personas.
Frank: Tratamos de cuidar cada detalle, hasta que el equipo de trabajo tenga las remeras de Gualicho. Estamos tratando de generar un cambio de imagen; pasamos de esa onda dura del rock, del cuero negro a algo un poco más moderno.
Emiliano: Algo con un poco más de colores.
Frank: Algo que vaya más de la mano con lo musical que estamos haciendo. Ese cambio tiene que reflejarse en el toque. Hay mucha cosa que pensamos, con detalles que para nosotros está bueno tenerlos.
SR: ¿Cómo viene la etapa de las nuevas composiciones y la grabación del próximo EP?
Emiliano: Como te comentábamos, teníamos grabados 30 temas para Intenso, pero de ésos no va ninguno para el nuevo trabajo. Van todos temas nuevos.
Frank: Hay uno que compusimos en el proceso, pero no van los de la primera etapa.
Emiliano: Sí seguramente vayan para el próximo álbum, que ya lo tenemos pensado, también, que va con otro concepto, con otra idea. Gino le dio esa otra onda, ese otro toque a la banda, y empezamos a componer temas nuevos y comenzamos a caminar por ciertos sub géneros que no hacíamos, como el grunge. Fue totalmente sin querer, lo empezamos a descubrir después de que lo escuchamos.
Frank: Cuidando lo que venimos haciendo, ¿no? No queremos emocionarnos demasiado con ciertos géneros, abrirnos y terminar siendo… Guachilo (risas).
SR: ¿El EP está medio definido, entonces?
Emiliano: Ahora termino de grabar las guitarras. Calculo que a mediados de octubre se van a grabar las voces, mezcla, master…
SR: ¿Sale antes de fin de año?
Emiliano: Es la idea.
Frank: El objetivo es que tiene que salir este año.
Emiliano: Nos manejamos siempre con objetivos y con fechas, y a raja tabla tratamos de cumplirlos. A veces hay imponderables que te marcan o te cambian, como la pandemia.
SR: Ese otro disco va a requerir alguna presentación, ¿no?
Frank: Con otro concepto, seguramente distinto a lo que va a ser ésta.
SR: Y ya están pensando en el tercero.
Emiliano: Sí. Va a ser un disco, y seguramente van a ser más temas de lo que fue Intenso.
Frank: El EP es una transición. Tiene que estar un EP entre medio, no un disco. Es un material que era necesario para nosotros que estuviera en un EP. Por eso son cuatro temas.
SR: ¿El EP va a tener el apoyo de algún video?
Frank: Sí, va a tener.
Emiliano: Uno ya está encaminado.
Frank: Va a ser bastante particular, y ya lo estamos trabajando.
Emiliano: También hay una conceptualidad en los dos videos de Intenso. Teníamos como objetivo sacar el tercero antes de fin de año. Vamos a ver si lo logramos. Y también queremos mostrar esa transición en los videos.
Frank: Para cerrar lo que fue Intenso, quisiéramos poder tener ese material antes del EP. Eso sería ideal para nosotros.
SR: El año que viene, también va a ser intenso, entonces.
Frank: El próximo disco se va a llamar Intenso volumen 2 (risas).
Emiliano: El año que viene va a salir el material de la presentación, también.
Frank: Todavía no sabemos bien cómo vamos a hacer con el material, si vamos a sacar unos videos o una tirada larga con todo el toque. Se va a grabar por pistas todo el vivo para poder sacar un disco de eso. En paralelo a eso y para que tengan una idea de la locura que tenemos nosotros, estamos armando nuestro PA, que también te lleva un tiempo.
Emiliano: Para poder ser más independientes.
Frank: De hecho, tenemos hasta el trailer, cajas, el grupo electrógeno. Tenemos todo pensado como para poder salir de una plaza, bajar, enchufar todo y tocar.
Ariel Scarpa