Ruido Salvaje debuta con Ver La Salida y lo hace de maravillas. Músicos experientes que vuelcan su saber en esta banda, conjugándose de manera perfecta para obtener un resultado excelente por la sinergia que se genera. Un disco muy logrado, con una dirección clara, que muestra un potencial concisamente registrado y que augura un futuro prometedor.

Existe en nuestro medio una necesidad de producir música, especialmente rock, que es el estilo que nos ocupa en nuestro portal. Los músicos suelen tener más de una banda para manifestarse. Visto desde afuera, la pregunta podría ser ¿es necesario? Pero cuando vemos los resultados que se plasman, por ejemplo en el disco que hoy nos ocupa, se entiende perfectamente. La necesidad se canaliza de manera impecable y nacen grandes canciones. Eso pasa con Ruido Salvaje y Ver La Salida.

Guitarras muy presentes a lo largo de todo el disco, las cuales van marcando la pauta sobre una base sólida de bajo y batería. Unas voces ajustadas al estilo que hacen muy bien su papel. Se logra un sonido compacto, basado seguramente en la experiencia de los ejecutantes y en una clara idea de lo buscado. Los temas que integran el trabajo son:

Cuatro golpes de palillos dan inicio al tema que da nombre al disco… y comienza el viaje. Esta canción es una incipiente muestra de lo que le seguirá; es completa y redonda, con sólida instrumentación, buenas interpretaciones, una tonada pegadiza y letra clara. “Crecer” llega para confirmar lo que manifestó “Ver la salida”, pero sumando. Tiene otra energía y está muy bien lograda. Rápidamente llega “Correr” y el ritmo sigue apurándose. Otro tema de los destacados del disco, con una base ametrallante sostenida sobre la que fluye la letra muy bien interpretada y con una excelente tonada. Sin decaer, es el turno de “Los días”, con buenos arreglos que la potencian. Luego llega el momento de “Volverme a levantar”, otra canción que desde el inicio se nota su efectiva calidad.

Irrumpen las guitarras para indicarnos que la que suena es “Sólo momentos”. Mucha fuerza que todo el equipo logra transmitir a la canción. “Sueños al viento” es otro momento de calidad, decorada con muy buenos arreglos. “Hoy” tiene poco más de un minuto de duración, pero no precisa más para mostrar un rock and roll furioso, dejando paso a “¿Dónde voy?”, que nos amaga en el inicio, arrancando a continuación y confirmando cuál es el sonido de Ruido Salvaje. “Seguir” es la canción que comienza a sonar, siendo un ejemplo más de que no es necesario complicarla mucho para rockear de lo lindo. El final lo marca “Salvaje”, una declaración de principios de la banda. Aparte de ser un muy buen tema, es perfecto para el cierre. Tiene una muy buena letra y mucha fuerza.

Canciones rápidas, efectivas y urgentes, como el estilo reclama. De cualquier manera, existe espacio para arreglos y destaques individuales y grupales. Es inevitable sacudir la cabeza mientras se escucha Ver La Salida, una señal inequívoca de que el objetivo se ha logrado.

Ariel Scarpa

La banda tiene pensada la presentación del disco para el 12 de marzo en Tazú junto a Vil Ruleta. Una buena oportunidad de verlos en vivo.