Abrir una disquería en estos días es todo un desafío. Y cuando se hace apuntando a lo más alto en todo sentido, el desafío se agranda. El Flaco (responsable de la Vinilo Fest), Charly y Michi no se achicaron sino todo lo contrario, redoblaron la apuesta y se mandaron con Tridente Records. Una disquería puesta con todo, donde se pueden encontrar vinilos de todo tipo (incluidos maxis y simples), CDs, cassettes y boxes. Una extensa variedad de estilos y de material expuestos para la venta en el local 7 y 8 de la Galería del Notariado (18 de Julio entre Gaboto y Magallanes). Conversamos con los tres dueños sobre discos y música por más de dos horas, y hubiéramos seguido. Pasen a leer.

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SR: ¿Cómo surge la idea de juntarse para crear Tridente Records?

Charly: La idea surge de una amistad de hace años. Un día en la Feria nos juntamos y empezamos a hablar, y a lo largo del tiempo se fue formando la idea. Hoy estamos acá, con algunas diferencias normales, pero juntos. Michi pone mucho aporte en el tema de venta y el Flaco también, que está al frente. Esto es amistad y trabajo.

SR: ¿Cómo juntan sus tres emprendimientos individuales en un solo?

Charly: Michi es un poco el que maneja todo y nosotros le ponemos el sí o el no, pero positivamente, abriendo el panorama. Vamos juntando todas las ideas y así la llevamos adelante. Hay que probar y se ve con el tiempo.

SR: ¿Por qué una apuesta al formato físico en épocas en que el formato digital tiene tanta difusión?

Charly: El Flaco y Michi fueron tirando ideas. Ellos son un poco los que van al frente y yo me voy acoplando atrás de ellos. Además del lugar físico, también trabajamos con la gente por Instagram, por Facebook o Whatsapp.

Michi: Yo soy de la época de los videoclubs. El primer videoclub lo tuve en el 2009, cuando Instagram no existía y Whatsapp recién se estaba creando, y la gente estaba obligada sí o sí a ir hasta el videoclub a retirar una película. La gente siempre estaba esperando lo último y el videoclub se nutría de los lanzamientos. ¿Qué pasa hoy en 2023? Para mí es tan importante una venta en Instagram, como una de Whatsapp, de la mano del local físico. Somos tres y cada uno tiene su material en su casa; si no lo mostramos no sabemos si se va a vender o no. La venta por Instagram o Whatsapp refleja un porcentaje de la venta del local, también. No es que tenemos el local y no estamos publicitando más nada. Es tan variado todo esto, que el público y la venta no salen de un solo lugar; también tenemos un puesto los tres en la Feria de Tristán Narvaja. Cada uno de nosotros tenemos algún cliente personal que se comparte: compartimos el material y el espacio. También atrás hay un sobre trabajo, que no es abrir un local y esperar que la gente entre. Hoy por hoy, tenés que traer la gente al local físico con incentivos de publicaciones, descuentos, promociones y material. Siempre estamos metiendo material nuevo y es una gran apuesta para nosotros porque siempre tenemos que estar metiéndole e innovando. Nunca te podés descansar en el laburo personal de la disquería. Nos ponemos de acuerdo y sacamos lo mejor de cada propuesta.

SR: Sumar clientes suma al negocio.

Michi: Por supuesto, tanto el cliente que compra como el que no compra, también. Porque capaz que no compra pero nos hace marketing sobre la buena atención que damos.

SR: ¿Qué tipo de material tienen disponible en la disquería?

Flaco: Mucho, está a simple vista. Tratamos de tener de todos los géneros y de todos los estilos, tanto en CDs como en vinilos. También tenemos cassettes, boxes, libros y hasta macacos de época, que es una parte de decoración bien retro del local. En cada disco tenés su propia oferta. Por los precios que manejamos en el mercado, son súper precios.

SR: Siempre rock, ¿no?

Flaco: Rock, blues, jazz, progresivo, metal, house, tecno, maxis, punk, música disco. Es imposible abarcar todo, pero tenemos casi todo.

SR: ¿Hay algún tipo de música que tenga más salida que otro?

Charly: Tal vez el rock, las bandas más conocidas. Después hay gente que viene especialmente a buscar su disco de blues, por ejemplo.

Flaco: Es variado. Creo que no se puede medir si se vende más rock and roll o pop. La música de los ’80 está abarcando un espacio más grande en esta década del 20. Hoy hay grupos que pegaron en los ’90 y como ya pasaron más de 30 años, es un oldie y la gente lo pide. Antes capaz que te pedían Creedence o Carpenters, pero como que quedó un poco desligado eso. Pero en venta, es muy variable. Puede haber un día que la gente venga buscando los clásicos, como los Rolling, Beatles, Pink Floyd, pero también busca cosas raras de blues (que nos especializamos en esos CDs), de metal o música pop de los ’80. Laburamos mucho con maxis, que hay una nueva generación.

Charly: También se busca mucho soul.

Michi: También está el tema de las rarezas, porque si no las tenés y no las mostrás, no sabés si se van a vender.

SR: Para ahí iba mi próxima pregunta: ¿qué tipo de joyas han tenido o tienen?

Charly: Ariel Perazzoli es un discjockey uruguayo que hizo una versión maxi extendida en 12” de un simple, del cual la versión 12” no existe. Con el trabajo de otra gente y mucho tiempo, Ariel llevó al tema “Solo” (de Peter Bardens) a esa versión, que no existe en el mundo. Y tenemos la suerte que Tridente lo tenía, porque se vendieron.

Flaco: En una semana vienen más. Hay muchas rarezas en la cultura vinilera, pero esa rareza muestra lo que es el amor al artista y al disco. Es un negocio como todo negocio, pero nosotros tres hacemos hincapié en apoyar al artista nacional, sea un discjockey, como en este caso que además es músico y productor. Ariel es reconocido e hizo esta versión que no existe en el mundo. Es un simple codiciado, muy caro, y él hizo una versión con material alemán pero con mano de obra uruguaya. A mí me servía más, como amigo, comprarle el disco por el hecho de que el cliente tenga esa novedad. Me han llamado de Argentina y de Chile por ese disco. Hay un apoyo de mi parte hacia Ariel, que es un monstruo como DJ y como productor. Lo mismo vamos a hacer con grupos nuevos, que podrán venir acá y dejar su disco sin ningún costo, sólo por el apoyo al artista.

Charly: Hay muchos DJs uruguayos que están trabajando y que no se ven tanto. Picón, por ejemplo, también sacó maxis. Hoy por hoy están un poco opacados porque no hay mucho boliche en la noche y esos DJs importantes no están saliendo a pista.

Flaco: En la jornada anterior de la Vinilo Fest, que le hicimos un homenaje a Los Estómagos, Ariel Perazzoli estaba tocando y le mostró a Peluffo la versión que había sacado de Los Estómagos. Y Peluffo, asombrado, le dijo: “Qué bien que está hecho. Tengo en el tintero sacar una versión del primer LP de Los Estómagos”. Quedó como un lazo donde puede haber un trabajo a futuro en conjunto.

SR: Tienen muchos boxes disponibles en la disquería.

Michi: De chico, yo era gran coleccionista de muñecos en base a películas y de la mano del videoclub. Cuando se terminó, me enganché con el vinilo de la mano del Flaco y después conocí a Charly, también, y me llamaron mucho la atención los boxes como artículo de colección, no como para comprar para revender. Lo veo como un objeto puntual y diferente dentro de lo que hay en el mercado. Cuando nació la propuesta de Tridente Records los empecé a traer de a poco. Es un artículo muy lindo.

SR: ¿Tiene salida?

Michi: No es que se venda como un vinilo, porque tiene un costo elevado que lo rige el mercado internacional y las agencias que lo traen en base a un peso. Pero se venden, sí, a corto o a largo plazo. Lo que nos está complicando es la reposición en ciertos boxes, porque algunos son partidas limitadas o por el tema de los costos. Se descatalogan y no podés volverlo a suplantar.

SR: La apuesta de cómo está puesto el local, es importante. ¿Piensan que puede haber un crecimiento?

Charly: El crecimiento va a estar.

Michi: Apuntamos a un crecimiento que sea paulatino, no brusco, de la mano de las novedades que siempre ingresan. Si nosotros nos quedamos, esto no va a crecer. Como somos tres, es un poco más fácil la entrada de material al local. Tenemos estrategias, como lo del POS, que es una herramienta de trabajo que pocos la tienen. Hay que saberlo utilizar para dar con la promoción.

SR: También conversábamos antes sobre que la disquería sea un punto de encuentro, más allá de un lugar de venta.

Michi: Sí, por supuesto.

Charly: Teníamos la idea de tener un lugar donde nos pudiéramos sentar a charlar con la gente, pero tenemos demasiados artículos para vender. Son discos usados, de época, pero como nuevos. Y nos quedó chico, no dio como para poner un living y poder atender mejor a la gente. Hubo una compra grande inicial de vinilos que eran de una radio. Empezamos por ahí y fue creciendo hasta lo que estamos ahora. Vamos comprando los ofrecimientos que nos hacen desde radios del interior y de a puchitos, y vamos haciendo papeles de compra-venta.

Michi: El material que tenemos es adquirido en el mercado uruguayo. Como dice Charly, a través de emisoras, particulares y de grandes coleccionistas. Es mucho volumen, tanto de material como en la parte económica. Por un tema de transparencia y de no tener problemas, lo llevamos a través de un escribano.

Charly: También Little Butterfly va a tener su espacio para tener el material de ellos.

Michi: Y estamos en tratativas con Hobby Vinilo. Hoy por hoy el local está lleno y tenemos que ver cómo hacerle espacio y fusionar todo en un formato de laburo. Que la gente venga a Tridente Records y encuentre desde una bolsita para vinilo a una púa, una pesita y todo el catálogo de Little Butterfly, de la mano de Mauro Correa, que hace un laburo increíble con su disquería y su sello. Nosotros tenemos material uruguayo, pero el complemento de él fortalece más el formato de trabajo nuestro, también.

SR: ¿Qué música escuchan cada uno de uds.?

Charly: Escucho un poco de todo, pero me gusta más el soul, el rock, porque lo conocí más hacia los 18 años. Como pasé música, también house y tecno. Después el Flaco me abrió un poco la mente y empecé a escuchar Psiglo, Días de Blues, cosas que para mí eran nuevas porque cuando sos discjockey, no escuchás eso. Para las generaciones nuevas, tiene que ser lo primero que agarren.

Flaco: Yo escucho de todo, surtido. Después de tantos años, aprendí mucho del cliente y me involucré con todos los estilos: metal, rock progresivo, punk, disco, baladas, hard rock y todo lo que es rock uruguayo. Creo que de todo. Hasta salsa, que son unos músicos de la masita. Y tengo un diamantecito con lo que es el rock argentino, que está muy despegado, a mi forma de ver. Escucho de todo, no tengo un perfil de una sola banda o un solo estilo.

Michi: A mí me gusta mucho el rock, el punk y el ska español, bandas como Marea, La Polla, y soy fanático de Los Ramones. De rock and roll, desde Los Rolling Stones. Es un abanico bastante amplio. En estos últimos meses de estar con ellos, empecé a escuchar muchos simples de muchas bandas.

SR: Ya no es lo mismo cuando se trata de vender discos, ¿no?

Charly: Sí. No es lo mismo vender un álbum que un maxi. Y el Flaco lo hace bien porque tiene años y conoce. Nos viene bárbaro que esté al frente porque es la persona indicada. Sabe lo que es un maxi, la versión, año; lo ve y te dice: “Esto es un remix del año tanto, con el sello original del año”.

Flaco: La gran escuela, para mí, fue la Feria, la misma gente que me compraba los discos a mí. Te estoy hablando tanto de un botija de 18 años como un veterano de 66. Acá mismo me sorprende que vienen gurisas y gurises del liceo y arrancan con Pink Floyd y me preguntan: ¿Tenés El Lado Oscuro De La Luna?”, o The Animals. Ya saben. Hay una escuela, una base, un papá y una mamá que deben influir. A veces aprendés de un gurí de 15 años.

Charly: En la feria he quedado sorprendido con lo que saben una cantidad de mujeres.

Flaco: El uruguayo sabe mucho de música. Lamentablemente no sabemos valorar lo que tenemos. Yo viví muchos años en Argentina y aman la música uruguaya, y acá a veces los dejamos pasar de largo. Con Tridente vamos por ese camino, de resurgir esas cositas, como hace Mauro Correa. Es un gusto personal mío, como estar al frente de la disquería, que es un trabajo y una responsabilidad que me la dieron ellos por amistad y confianza, pero también es un desafío de llegar a lograr algo más allá de un negocio. Quiero lograr el empujón que le falta al uruguayo. Ahora estoy viniendo en el ómnibus y veo locos que suben a tocar y la gente está enganchada con el celular, no escuchan. Aparte de ayudar con la monedita, está bueno el aplauso. Yo voy a eso, hay que ayudar a lo que es la cultura nacional, e internacional, también.

Michi: Flaco, vos con la Vinilo Fest lograste una unión que fue algo increíble. Formaste un gran evento con más de 20 expositores cada dos o tres meses, y también surgió la unión nuestra. Todo tiene que ver, tu trabajo independiente con tu trabajo grupal.

Flaco: Había veces que algunos no entendían el concepto de estar juntos, tanto en una feria como en una feria de vinilos como la que hago yo, y que la unión hace la fuerza. Pasa en Argentina. Vas a Parque Centenario, que es una plaza donde hay más de 30 ó 40 disqueros y todos se ayudan entre todos, no hay egoísmo. Yo traté de hacer algo similar con la Vinilo Fest: que vayan todos los expositores y tratar de estar fusionados, unidos por el disco y la cultura. Tengo un clan de DJs que son de lo más profesionales, y le ponen buena onda al laburo de ellos. Estoy agradecido con cada feriante y disquería que va a participar porque es todo armonioso. Y a eso le agregamos un homenaje a un artista nacional en vida. Porque cuando lamentablemente cuando se van a otro mundo, está buenísimo hacer un evento porque facturás, y acá es cero costo. Hay un gasto, pero lo que no te genera en el bolsillo, te lo genera en el alma. Y aparte, ayudamos a un merendero que está muy bueno.

Michi: Y todo sin fines de lucro con todo lo que conlleva el evento, con toda la organización con las tablas, las placas y la propaganda, que la hace él solo.

Charly: También está El Mesón, que está Pablo, y que junto con el Flaco organizan esto.

Flaco: Mi señora conoce mucho lo del merendero. Es un tipo que, lamentablemente, acarrea una gran enfermedad y se levanta cada mañana a darle un desayuno a los gurises. En un momento se tenía que hacer quimio y estaba con neumonía, y como había hecho una cancha de basketball, se quedó toda la madrugada cuidando para que no se la pisaran. El loco es de otro planeta.

SR: La movida de la Vinilo Fest está buenísima.

Flaco: La próxima es el 9 de diciembre y el 20 nos juntamos todos los disqueros en El Mesón haciendo una comida hablando de discos, para variar (risas).

Charly: Hemos hablado de llevarla a otro nivel, tratar de hablar con la Intendencia para organizarla en la explanada.

Flaco: Es una meta mía pero no lo he hecho. Hace unos cuantos meses, cuando empezamos con el proceso de Tridente, me sacó mucho tiempo de otras cosas. Me han surgido varias propuestas que las he pospuesto porque no tengo tiempo. Una de las cosas que tengo que hacer es ir a hablar a la Intendencia para tener un apoyo, no monetario, sino de tener un día, como tiene la Feria del Libro, para hacer la feria del vinilo en la Intendencia. Se pueden fusionar otros artistas. Yo creo que sería una linda movida. Cuando es un evento así y por todo lo que implica, tendría que ser de interés nacional.

Charly: El vinilo es algo que llevamos muy adentro. Le tenemos amor al formato.

Michi: Y el gran trabajo que hay atrás, porque no es sólo comprar y vender.

Flaco: Son cosas que a uno le gustan. Yo se lo agradezco a mi padre, que tenía un trío en el que tocaba la armónica y que vino acá con Cacho de la Cruz. Vino al Canal 10 en el ’63 – ’64, que era en el Cilindro. Hacían temas de Los Beatles con armónicas. Y de ahí, tengo toda esa cuna.

Ariel Scarpa

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