Y llegó el día en que Jorge Flaco Barral tocó nuevamente en Montevideo. La presentación de su librisco Sobras Completas, obra del escritor Paco Espínola, fue un excelente motivo para contar con la presencia de Flaco en su tierra natal. Este nuevo regreso puntual del reconocido músico uruguayo fue cálidamente recibido por un público (su público), que emocionadamente aplaudió de forma intensa cada una de sus canciones.

El librisco está compuesto por una detallada biografía y dos CDs con 41 canciones de Flaco que intentan resumir sus aportes a la música a lo largo de su carrera. En el escenario el desafío fue resumir aún más su extensa obra y presentarla en casi dos horas de concierto. Y logró hacerlo de forma impecable, trayendo sus clásicos y versionándolos según su experiencia actual, en un formato básicamente acústico pero cargado de intensidad musical y emocional.

El espectáculo tuvo una muy buena introducción a cargo de Fernando Peláez, destacando algunos pasajes de la historia de Flaco. En su alocución hizo mención al reciente descubrimiento por parte de Ángel Atienza de la grabación de cuatro temas de Opus Alfa tocando en el Solís, lo que se transformó en una gran noticia hasta para el propio Flaco. El repaso histórico estuvo impregnado de recuerdos, como la histórica presentación en el cine Arizona con la despedida de Días de Blues antes de la partida de Flaco para España, en 1973.

El show comenzó con “Ilusión” de Opus Alfa, interpretada por la banda base que lo acompañó en este concierto, compuesta por Pablo Traberzo en guitarra, Daniel Escanellas en vientos y Luis Gutiérrez en percusión. Los instrumentos fueron alternándose según los requerimientos de cada tema. En “La casa de las matemáticas”, por ejemplo, hace irrupción un chaturangui, descripto detalladamente por Flaco en su composición y funciones, transformando la canción en algo mágico y emocionante.

Hubo tiempo y lugar para los diferentes invitados que desfilaron. Así Jorge Nasser se unió para “Vuela”, Santi Cutinella para “Bien lejos”, Tabaré Rivero para “La calentura global” y, en evocación a The Crabs, Rolando Fleitas y Roberto Baras para “Daydream believer”. Párrafo aparte merecen sus clásicos “Amasijando los blues” y “Dame tu sonrisa, loco”, que fueron súper aplaudidas y que se desarrollaron con impresionantes versiones con excelente participación de Traberzo.

Gran desempeño de la banda con destacada y bien calibrada intervención de todos, incluidos los invitados, dando a Flaco el lugar que merecidamente le corresponde. Un espectáculo desbordante de música y de rock, en el marco de lo que el propio Flaco genera con su personalidad y sus canciones. Un show que quedará en el recuerdo de todos quienes tuvimos la suerte de estar presentes.

Ariel Scarpa