A las puertas de un nuevo toque de Los Traidores nos pareció un buen momento para hablar con sus dos referentes: Juan Casanova y Víctor Nattero. Una charla de bar donde pasamos por la actualidad de la banda, su postura, sus ideas y su visión del rock actual. Mucho para decir por parte de dos figuras claves de nuestro rock, integrantes eternos de una de las bandas referentes de los ’80. Para Sólo Rock esta entrevista era un pendiente desde nuestra época de fanzine, así que nos pusimos al día. Como adelanto, nos comentaron que tendrán una presentación acústica el 29 de julio en la Sala Hugo Balzo. Pero hay mucho más para leer en esta entrevista.

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SR: ¿Qué motiva el toque del 3 de junio?

Juan: Se dan muchas cosas. La primera es que todos los años nos están ofreciendo hacer toques, siempre. Siempre hay productores, festivales, gente que quiere que toquemos. Este año pasa algo especial, que es que hace 40 años que en un invierno del año ’83 nos juntábamos por primera vez y fundábamos Los Traidores. Eso tiene como su peso. Otra cosa que pasa es que todos los días, todo el tiempo y sobre todo después de todo el desastre de la “emergencia sanitaria”, la gente empezó a pedir cada vez más que tocáramos, que era el momento, que es ahora. Entonces se juntan un montón de cosas que hacen que hoy hayamos logrado resolver la logística necesaria como para poder juntarnos y tocar. Es eso, sobre todo. Sentir el cariño de la gente, el aguante en la calle, en las redes, y eso es lo que motiva todo, la gente que mantiene vivas estas canciones.

Víctor: Más allá de las ganas, ¿no? Teníamos muchas ganas de juntarnos, de tocar. Hay momentos, y este es un buen momento, es excelente.

SR: ¿Qué van a presentar como espectáculo?

Víctor: Vamos a presentar los clásicos de siempre, que es básicamente lo que la gente está pidiendo, de todos los discos.

Juan: Es un show bien rockero que reúne los clásicos de todos los tiempos. Esto es una celebración para la gente que realmente quiere a la banda y quiere esas canciones. Es un celebrar juntos para nosotros dos, que todavía estamos en el partido no sabemos por cuánto tiempo, pero seguimos jugando. Es eso, es reunirse con la gente que le gustan y que aman las canciones, porque eso es lo que es realmente importante.

Víctor: Cada vez que nos dan libre en el asilo, decimos “bueno, nos juntamos, hacemos algo y después volvemos” (risas).

SR: ¿Cómo se conforma el resto de la banda para esta oportunidad?

Víctor: Nicolás Rodríguez en batería, Miguel Nieto en el bajo y Luis Angelero en guitarra.

Juan: Estos amigos hace tiempo que me venían acompañando a mí en mis toques solistas, y como tocamos un montón de veces canciones de Los Traidores, ya tenían un conocimiento de los temas, lo cual allanó el camino también para que pudiéramos hacer un show lo antes posible. Y además es gente toda que ama también a Los Traidores y que les significa muchísimo tocar esos temas, lo cual a nosotros nos da tremenda fuerza, tremendas ganas de compartir con ellos.

Víctor: Excelentes músicos, tremenda energía que contagia. La fusión que hicimos es perfecta.

SR: ¿Por qué les parece que la pandemia, de alguna manera, disparó en la gente la necesidad de ver a Los Traidores?

Juan: Porque mucha gente se dio cuenta de qué diablos hablábamos, por fin. Porque en cierto momento, por ejemplo, cuando cantábamos “angustia de vivir una guerra constante” en “Crónica del sur” en Radio Babilonia, mucha gente que pretendía, no sé… bailar, decía: “Uh, otra vez hablando de la guerra”. Y esto es lo que vivimos ahora, ¿en 2020 te quedó claro? Vivimos ahí una guerra contra la humanidad.

Víctor: En algún momento hasta se nos tildaba de oscuros, de mal agüero, y… tiempo al tiempo. Los temas hablaron por sí solos.

SR: Estamos haciendo como un retroceso en la vigencia de las canciones.

Víctor: Puede ser, sí, sí.

SR: Canciones de avanzada en su momento, y la situación actual retrocede a ese momento dándole otro valor a esas canciones.

Víctor: Exacto. Misteriosamente pasa eso con las canciones nuestras. Sin quererlo o, como decía la otra vez, este país es muy chato y repite constantemente todo. La pandemia fue una vidriera de todo eso.

SR: ¿Les parece que Montevideo agoniza?

Víctor: Qué difícil…

Juan: Por supuesto. Por eso ese disco Montevideo Agoniza, incluso con seis temas censurados, se mantiene a lo largo de las décadas. La desesperación que teníamos nosotros como adolescentes en aquel entonces durante la dictadura local, es la misma que se vive hoy durante la dictadura global. Es lo mismo. Gente joven sin esperanza que siempre encuentra un eco en esto. Y mientras la lluvia siga cayendo por Montevideo y tú la puedas ver por la ventana y haya programadores que entiendan de qué va la cosa, siempre vas a escuchar “La lluvia cae sobre Montevideo”, porque habla de un tema universal, del mismo modo que “Flores en mi tumba” o “Montevideo agoniza”. ¿Por qué? Porque nunca vivís, no te terminás de morir…

Víctor: “Sólo fotografías”.

Juan: Siempre estás corriendo atrás, estás como en un estado de que no vivís. Acá en Uruguay, la capital más cara del mundo, probablemente, es un desastre todo el sistema político. Es lo mismo de siempre, los “Juegos de poder” y vos sos el último orejón del tarro. Es lo mismo, nada cambió. Montevideo claro que agoniza.

SR: De alguna manera, la banda está siempre en actividad. Tiene parates pero nunca está disuelta.

Víctor: Mientras estemos Juan y yo, creo que va a seguir estando. Hay momentos cuando no da, no da y después seguimos. Nos presentamos cuando da la situación, cuando hay energía como para hacerlo. Mientras estemos nosotros dos, está vivo.

SR: Y no choca con los proyectos solista de cada uno de uds.

Víctor: No, para nada.

Juan: No, Traidores tiene vida propia. Traidores no nos pertenece a nosotros, pertenece a la gente que escucha esas canciones; tanto a la gente que las viene escuchando hace décadas como a la gente que las descubre ahora.

Víctor: Ya las hicieron suyas.

SR: ¿Cómo ven esa llegada a la gente joven?

Víctor: Es complicado pero no imposible. Como dice Juan, muchos se van adhiriendo, van encontrando un mensaje. Empiezan por transmisión de familia o lo que sea.

Juan: Cada vez que tocamos hay muchos padres que llevan a sus hijos, del mismo modo que en otros tiempos los hermanos mayores llevaban a los hermanos menores. O como en aquel Teatro de Verano que nos corrieron los milicos, que entre el público estaba un muy jovenzuelo Sebastián Teysera que con 12 años lo llevó su primo el Boca Pellistri, el padre de Facu, que era re fanático de Traidores. Cuando el enano nos vio a nosotros ahí, dijo: “Yo algún día voy a estar ahí arriba”. Así que hay algo que sobrepasa lo que somos nosotros y las intenciones que tenemos. Hay una magia ahí que tiene que ver con las canciones que en algún momento compusimos.

Víctor: Y que no la manejamos más nosotros.

SR: De alguna manera son una banda superviviente de aquella época. Esa vigencia se mantiene.

Juan: Tocamos ciertos temas que trascienden el momento y muchas veces aunque no se entienda de qué va la cosa, como Víctor bien decía, tiempo al tiempo, las cosas se van descubriendo y salen a la luz.

Víctor: Yo creo que las canciones se pegaron a la gente porque supimos traducir lo que pasaba en aquel momento, y misteriosamente sigue pasando mucho tiempo después.

SR: ¿Visualizan que haya alguna otra banda de rock nacional que esté más o menos alineada con la propuesta de Traidores?

Víctor: Yo no lo veo.

Juan: Tenés algunas bandas que, de repente, se inspiran en las primeras épocas de Traidores. En La Sangre de Verónika es clarísimo, hay una conexión ahí con estos amigos y así hay otro montón de bandas que tienen más que ver con la época fermental de Los Traidores, al principio en la época más punkie. Pero después, Traidores es único e irrepetible, porque nosotros no quedamos en una fórmula punk rocker, siempre intentamos cambiar, expresarnos de otro modo.

Víctor: Ir más allá. Es verdad lo que dice Juan, pero no encontraba la relación con las bandas porque yo, por lo menos, no he escuchado algo similar que suene como suene. Siempre fuimos más allá.

SR: ¿En qué momento creen que está el rock nacional ahora?

Víctor: Para mí está totalmente estancado. No podés tener tres planetas pivotando y repetir, repetir y repetir. El rock está estancado en el mundo.

SR: ¿Hay alguna forma de salir de esa situación?

Víctor: No lo sé, la verdad.

Juan: La música siempre encuentra los caminos. Punto. Cuando decís “el rock está muerto”, como pasa ahora en Uruguay, es porque no hay nadie que diga nada porque están todos alineados con el sistema. Algunos quieren ser el mejor yerno del mundo, otros hablan de utopías de mundos que ya no existen; ninguno tiene los pies en la tierra. O sea, muchos se quedaron sin rebelión cuando se dieron cuenta que lo que apoyaban era otra basura y otra mentira. Hay mucha gente que hace cosas pretendidamente revolucionarias o rockeras que carecen totalmente de sustento y están alineados con alguna que otra ideología política, que son a los que le dan la plata en los festivales y bla, bla, bla. Hay mucha gente que hace música nueva que tiene un enorme valor artístico, porque hay enormes talentos en Uruguay como siempre hubo, pero que a mí no me representan y no tienen nada para decir. O sea, son pura estética. Y ahora es tiempo de poner los cojones arriba de la mesa, como siempre hicieron Los Traidores.

SR: ¿Les parece que el rock puede seguir siendo una herramienta de cambio o ya caducó?

Víctor: Para mí, caducó. Todo lo que escuches que digas que te sorprenda, va a ser de la gente vieja, de la que ya está haciendo música hace mucho tiempo. No recuerdo quién había dicho que el rock iba a quedar en manos de la gente vieja, no vas a encontrar nada que te sorprenda. Hay todo un plan para destruir a la juventud. En todo caso lo que está pasando es que la música está cambiando para peor. Es un enfoque muy personal, es mi pensamiento.

SR: La música como un aspecto de todo el deterioro general.

Víctor: Latinoamérica está invadida por una música que es un asco. Ya está perdido, no se puede ni discutir, es tiempo perdido. De última, está bien que esté en manos de quienes está, de quienes pueden llegar a patear el tablero, por decirlo de alguna manera. Es un tema un poco extenso y un poco más complicado de lo que yo puedo ver.

SR: ¿Cómo invitarían a la gente a que fuera al toque?

Víctor: Es complicado porque ya no quedan lugares (risas).

Juan: Que vayan con toda la adrenalina puesta.

Víctor: ¡Total! De nuestro lado va a estar todo, vamos a dejar todo ahí.

Ariel Scarpa