ALFONSO CARBONE
Desde nuestros primeros números intentamos contactar con Carbone, quien estaba al frente de las ediciones discográficas de rock nacional a través del sello Orfeo del Palacio de la Música. Sus programas en radio y televisión lo habían puesto en el tapete y era una “cara conocida”. Pero acceder a él, por lo menos a nosotros, no resultaba tan fácil. Después de varios intentos (y ya no me acuerdo cuándo) nos recibió. Fuimos con uno de nuestros primeros números en mano, y más allá de lo precario y amateur de nuestro trabajo, algo le despertó cierto interés en Sólo Rock, porque de ahí en adelante siempre contamos con su apoyo.
Más allá de las palabras de aliento, nos hizo sentir y notar que nuestro trabajo tenía valor. Es así que se prestó gratuitamente a promocionar a Sólo Rock en sus programas de televisión, como consta en los videos que hemos publicado en nuestro canal de YouTube. Tuvimos oportunidad de entrevistarlo un par de veces, una de ellas como rockportaje central, donde se prestó a una de las charlas más largas que tuvimos con un entrevistado. También colaboró dando su opinión en alguna oportunidad, la cual registramos en nuestras páginas.
Nos habilitó para que el Palacio nos entregara material de difusión de las ediciones discográficas para comentar en lo que era nuestra sección En La Bandeja. Nos solucionó todos los problemas que tuvimos durante la edición de Montevideo Rock II, comenzando con facilitarnos el acceso a todo el equipo, cuando habíamos sido marginados en las acreditaciones, y solucionando la negativa de cierta parte de la organización a permitirnos acceder al sector de fotógrafos el segundo día del evento.
A pesar de ser una persona bastante cuestionada en su momento, en lo que tiene que ver con la revista no sólo que no tenemos nada negativo para decir sino que además le debemos unas cuantas. Al igual que otras personas de los medios que siempre nos apoyaron, como Quique Pereyra y Darío Medina, entre otros, fue un aporte importante para el crecimiento de Sólo Rock.
SÁDICA
Hoy por hoy puede causar hasta cierta envidia, pero lo voy a decir: tuvimos la oportunidad de ver a Sádica varias veces en vivo. La primera vez fue en el festival denominado Parque Rock-dó, y tengo muy presente que nos impactó. En parte nos sorprendieron, pero también nos parecieron muy buenos en lo que hacían.
De una de esas veces que los vimos en vivo, recuerdo especialmente un toque under en un garaje en la calle Jackson, cerca de la Rambla. Eran varias bandas las que tocaban y entre ellas estaba Sádica. A tal punto nos gustó que no recuerdo el nombre de las demás bandas pero sí me quedó grabada su actuación y cómo participaban de lo que hacían los demás grupos.
En algún momento del espacio-tiempo los contactamos para la entrevista de nuestro número 15, y allá fueron los tres por nuestra “redacción”. El recuerdo que tengo es un rockportaje divertido e irreverente, rebelde, como la propuesta de la banda. Una larga charla de la cual lamento no tener más el registro de audio, que hoy sería un documento invaluable. No sé cuántas entrevistas habrá tenido Sádica, pero para nosotros fue un acercamiento más a una banda del sustrato under, tan valioso y tan presente en esa actualidad. Un registro de lo que era en ese momento y que, curiosamente o no tanto, se asemeja mucho al under actual. Pero de la mano de una banda que hoy por hoy sigue siendo un referente del género.
Ya no existe más Sádica ni nunca podrá ser igual a lo que fue. Por suerte quedan unos registros musicales y nuestra entrevista, para completar lo mejor posible el legado de Yuyo, Néstor y Fernando.
Ariel Scarpa