Metal Battle 5: 22 De Abril De 2023

Lamentablemente es cierto, pero el conocido refrán se cumple. Todo lo bueno dura poco. Y así fue. El pasado sábado 22 nos dimos cita nuevamente en Midas Music Bar para cumplir con la quinta fecha eliminatoria del Wacken Metal Battle Uruguay 2023, donde alcanzamos a definir las cinco bandas finalistas que participarán de la gran final del próximo sábado 6 de mayo, de donde saldrá quien nos representará en el Wacken Open Air 2023 de Alemania. En esta oportunidad, las bandas participantes fueron Do.Mo., Forastero Western Metal, S.O.M., Enérgica y Cerebral Damage.

Como es de costumbre en estas fechas 2023 así como fue en la de ediciones anteriores, puntualmente 23:30 arrancó la primera banda. Para el caso, los muchachos de Do.Mo. (Dominados Morimos). Esta banda, que ejecuta un thrash con toques de groove metal, abrió la noche a pura estridencia y sonido fuerte como dándote un sopapo de rock para ahuyentar así cualquier vestigio de serenidad o modorra en el ambiente y dejar al borde de un ataque de nervios a cualquier profesor de reiki, yoga y cualquier otra de esas técnicas de pacifismo corporal, de mirarse para adentro, conocer el yo y demás actividades seudo-pornográficas de estos tiempos.

Canciones muy directas con muy buena ejecución, donde las guitarras lideran la performance con sonidos muy potenciados y el bajo y la bata sostienen la base del tema. Los chicos oriundos de la ciudad de Suárez, pago de próceres, dieron un gran show encargándose de la para nada sencilla tarea de abrir la noche, cortar el hielo del ambiente y contagiar fuego para templar la sangre y las almas de los presentes, con influencias de Iron Maiden, Accept, Sepultura, entre otros.

A segunda hora llegaron cabalgando desde el lejano oeste (bueno, no tanto, tan sólo desde Maldonado, de donde son oriundos) los chicos de Forasteros Western Metal. Los cuatro forajidos ausentes de buenas costumbres, esquivos de la ley y rebeldes ante las jerarquías, emprendieron su marcha hacia la capital a seguir cometiendo varias de sus fechorías. Luego de desensillar de sus nobles corceles, aparcarlos fuera de la zona tarifada y dejarlos bajo el cuidado y la atenta mirada del «cuida caballos» de la cuadra… emprendieron su embestida musical a pura adrenalina, grito y desenfreno bajo el lema de «fucking beer», ante lo cual el público replicaba con “¡Ohhh, yeah!”.

Con parámetros musicales de bandas como Metallica, Anthrax, Megadeth y varias más, los desacatados bebedores de bourbon dieron un show que impresionó gratamente a muchos de los presentes, dando una sensación de gratificación como luego de un bidetazo que te deja «ano-nadado». Una banda que mostró no sólo originalidad en su vestuario acorde a su nombre, sino que además son una propuesta llevada a cabo por excelsos músicos, que suenan muy bien y todo dentro de un estilo que muy pocas bandas o casi ninguna ejecuta en nuestra escena metalera, la cual podríamos decir que tiende más a estilos extremos. No por nada, al final de la noche cosecharon sus frutos.

En tercer lugar arremetieron los chicos de S.O.M (Source Of Mysteries). La banda formada en el 2011 en la ciudad de Montevideo y que incursiona por los estilos del nu, thrash y metalcore, retomaron la senda de música un poco más dirigida hacia lo extremo, donde el dúo de vocalistas nos brindan distintas tonalidades que dan una gran variedad y constantes cambios en cada una de las canciones. Un sonido que se presenta contundente, de ritmos muy marcados y con un dueto de guitarras fuertes y agresivas, lo que brinda una tonelada de energía que provoca naturalmente que el público estalle en un pogo poco amistoso de esos que el metal nos tiene acostumbrados.

Las canciones poseen cambios de ritmo, los cuales a su vez nos regalan espacios para distintos climas, logrando así que los temas se vuelvan cada uno muy disfrutable por las variantes que nos ofrecen. Una banda con más de una década pisando escenarios y nadando en el under nacional, con ya un disco grabado y trabajando para lo que será su próximo trabajo. Es sabido que no es fácil mantenerse con vida en la escena local, lo que obliga a evolucionar y aggiornarse pero sin que esto signifique perder la identidad. S.O.M. es otro baluarte del metal nacional que vive y lucha contra las plagas de estos tiempos, sosteniéndose en una muy firme línea compositiva de calidad dentro de la cual siguen dando aportes para mostrar de lo que son capaces y así mantener viva la llama del infernal metal.

A posteriori se presentó el cuarteto montevideano Enérgica, quienes desde 2015 incursionan por los bares, pubs y boliches rockeros del país, más alguna que otra aparición en el extranjero, así como la participaron del «Argentina Online Metal Fest». Los muchachos fueron otra gran sorpresa para la noche, dado que son otra variante dentro de la escena rockera – metalera nacional.

Chicos que fusionan los estilos del hard rock, heavy metal clásico y rock alternativo y que sonaron de maravilla, dejando entrever que querían dar pelea en esta batalla con titanes del metal. Mucha conexión sobre las tablas, que complementada con la energía que el cuarteto de músicos expone, hacen que las canciones suenen vibrantes, compactas y efectivas. Nos dieron una buena dosis de energía la cual supieron dosificar durante toda la actuación, lo que logró un show compacto, que no decayó en intensidad ni en atención de parte de los escuchas.

Para el cierre, otro de los platos fuertes de la noche, la banda Cerebral Damage arremetió con todo para hacer honor a su nombre. Los muchachos formados en Montevideo justo antes que empezara la pandemia por todos conocida (la de coronavirus, no la del «conejo maldito») dieron un broche duro de roer que significó una bofetada de ánimo para que continuaras pogueando y peludeando a pesar de la discapacidad capilar de muchos de nosotros.

Con una voz gutural más alguna tonalidad desgarradora, la banda nos muestra con marcada fuerza musical e interpretativa todo su material construido sobre las bases de viejas influencias clásicas del estilo death y grind de grupos icónicos, como Death, Obituary, Morbid Angel, entre otros. Sus interpretaciones exponen una holgada potencia que se sustenta en buenos riffs y una contundente base, coronados majestuosamente en muy sólidos solos de guitarra. Canciones con ritmos marcados y con los quiebres necesarios para tornarse en interesantes, con el agregado de muy buenos arreglos y cambios musicales que le dan personalidad y una atmósfera densa, creando climas diferentes para cada uno de sus potentes entregas. Otra muy buena banda, de corta experiencia pero de seguro con un muy auspicioso y extenso futuro.

En resumen, da gusto ver que bandas como las que actuaron en esa noche siguen surgiendo a pesar de todas las vicisitudes que existen en nuestro país y en el mundo entero. En definitiva, unos rebeldes como estos que son tan necesarios para dar un poco de equilibrio a este fétido mundo y tratar de encauzarlo por sus debidos carriles.

Sí, queridos conciudadanos de este planeta del rock, esas notas, armonías y melodías musicales que compartimos son un mensaje de vida, muerte, amor, locura, odio y sensatez, donde no necesitamos para hacer llegar nuestro mensaje, acompañarlo con movimientos de zonas corporales que naturalmente están exentas de la luz solar. El rock se mantiene vigente en su forma más pura de revoltoso, contestatario y derribador de muros alejado de toda obscenidad y discriminación.

Recabados los votos del público, los invitados, los medios acreditados y la producción, el resultado arrojó como victoriosos de la noche a la banda Forastero Western Metal.

Tomás Cámara