Ónix – Bitácora (2021)

Seis canciones componen el primer EP de la banda nacional Ónix. Seis canciones que reflejan seis buenas facetas que muestran un arco iris de posibilidades que los experientes músicos exploran y al cual nos invitan, no sólo a conocer, sino a participar. Porque su música nos sugiere eso, zambullirnos en la experiencia y vivenciarla.

Ya al inicio de los primeros sonidos emanados de Bitácora, se nos brinda una certeza de dónde estamos empezando, pero hay una sugerencia latente a descubrir lo que continuará sonando. Es como si nos dijeran “tomen, pero esperen y verán”. Algo así. Es una invitación a un paseo sicodélico en un mundo lleno de elementos variados, los cuales en su conjunto y adecuadamente ordenados, surten el efecto de cautivar al escucha.

Foto: Gonzalo Figueroa

En Ónix participan Rafael Sienra (guitarra y voz; ex Zake), Daniel Tomikián (batería y teclados; Cross, Ginebra, Bronson y los Turbios) y Guillermo Larrosa (bajo, ex Crysler). La formación para la grabación del disco se completa con Ivanna Molina (guitarra y voz) y Nacho Burmidad (vientos). Fue grabado en estudio Encrucijada entre agosto y diciembre 2020. El técnico y el encargado del masterizado fue Orlando Fernández, remasterizado en emastered, Estados Unidos. Los temas que componen el disco y sus autores son:

Alerta (Tomikián) – Lucky (Sienra /Tomikián)

Bitácora (Sienra) – Los Ángeles (Tomikián)

Flor del Desierto (Sienra/Molina) – Nueve (Tomikián/ Sienra)

“Alerta” funciona como una alerta. Su teclado al mejor estilo de película de suspenso nos anuncia que van a pasar cosas. Y pasan. Lo primero en ocurrir son furiosas irrupciones de guitarra, bajo y batería, para luego dar paso a “Lucky”. Mezclando diferentes sonidos logra sonar de manera sorprendente, con bases cambiantes. “Bitácora” se presenta más calmo en su música, la cual llega como en oleadas mientras la voz nos cuenta la historia, logrando cierto encantamiento. “Los ángeles” sigue poniéndonos difícil discernir si cautiva más la letra y lo vocal o la música. En realidad, poco importa, ya que la conjunción pone a las canciones por encima de los elementos que las componen. “Flor del desierto” es casi el último tema. Reina la calma en una canción muy cuidada que va caminando por distintos pasajes. La despedida es con “Nueve”, también al estilo cinematográfico en su música y en su habilidad por traernos imágenes. Geniales las dos notas de teclado al final.

Foto: Gonzalo Figueroa

Bitácora es diferente desde varios puntos de vista. Su propuesta destaca como sorprendente y nos acerca creaciones muy interesantes. Existe una hermandad entre la música y la voz que son disparadores del viaje que la banda nos propone en este EP. Su corta duración nos deja con ganas de seguir descubriendo lo que Ónix tiene para ofrecernos, así que permaneceremos con nuestros oídos abiertos.

Ariel Scarpa