Vedas Toronado es una banda de rock nacional que viene haciendo públicos temas que adelantan lo que serán un próximo disco. Habiendo dejado disponibles cuatro canciones, es un auspicioso avance de lo que promete para el futuro cercano, presentando un rock potente basado en diferentes sonidos extraídos de sus influencias. La banda está conformada por Christian Trapp (voz y guitarra), Rodrigo “El Mono” García (guitarra), Juan Ángel Rodríguez (bajo) y Marcel Lamas (batería). Charlamos con los dos primeros, y lo que sigue es lo que nos contaron.
SR: Cuenten un poco la historia de cómo llegan a este proyecto de Vedas Toronado.
Christian: Llega de manera bastante improbable, porque a Rodrigo, el Mono, lo conocí en un toque que hicimos con bandas. Yo tenía una banda llamada Loto y él estaba tocando con La Cosa Nostra. Salió un toque en un parador, nos vimos una vez y pegamos buena onda y hasta ahí llegó nuestra relación. Nos quedamos con algún teléfono y ya está. De ahí pasaron dos años sin intercambiar ninguna palabra con él. El proyecto en el que yo estaba terminó y a mí se me ocurrió arrancar un proyecto nuevo. Tenía ganas de hacer algo. En ese momento como que me había pinchado un poco las ganas de hacer un proyecto musical con cierto empuje. Y ahí, andá a saber por qué cosas de la vida, me acordé del Mono. Tengo el recuerdo vívido de que iba en un bondi yendo como para el lado de la costa, ya que yo vivía en Médanos de Solymar, y le mandé un mensaje y me contesta prácticamente como diciendo ¿quién sos vos? Yo le recordé y empezamos a hablar y le tiré la idea de este proyecto, justamente. Un día me caí en la casa del Mono y ahí arrancamos algo que hasta el día de hoy no paró. Nos empezamos a conocer, a juntar y nos hicimos muy amigos. Todos los miércoles yo me iba para lo del Mono y estábamos horas componiendo, grabando, tirando ideas. Le habíamos puesto “los miércoles religiosos”. Así la banda surgió de nosotros dos; después empezaron a caer el resto de los músicos. Hacíamos la música con baterías MIDI, grabando guitarra, no había bajo. Hicimos como 500 maquetas con guitarra, batería y alguna voz, pero murmuradas, ni siquiera había letras. Así surgió en realidad la banda, y después hay una larga data de músicos que pasaron y demás. Desde ese momento en que terminamos todo el ajuste, nos planteamos armar una banda sin ponernos techo y sin prejuzgar lo que salía. Algunos nos decían que si salía en inglés éramos unos vende patria. Yo toda la vida escuché música de los ’90, a mí me atrapó Soundgarden, Pearl Jam, Alice In Chains; lamentablemente no me atrapó otra cosa que fuera más autóctona, si se quiere, me atrapó eso y no pude hacer nada. Escuché Nirvana y me voló el cerebro. Por ahí escuché otras cosas acá que no lograron ese impacto en mí, y no puedo hacer nada al respecto. Quise ser sincero también con eso, porque a mí las letras me salen en inglés, lo murmuro en inglés, o sea, tiro cosas como en inglés. Vamos a hacerlo así por más que nos caguen a puteadas. Esto es lo más honesto que podemos hacer. Y el Mono tenía una formación musical similar, había mamado más o menos lo mismo. La impronta que llevamos hasta el día de hoy es decir por qué una vez en la vida no agarramos y hacemos un proyecto de banda pero con otra perspectiva, que no sea la de juntarnos, nos tomamos unas birras, ensayamos, y vemos si sale algún toque y si cae Jesucristo y nos lleva al estrellato, o no sé, lo que sea, que siempre fue así porque lo primero es la música. Pero dijimos vamos a hacerlo bien, vamos a estudiar el mercado, la industria de la música, cómo se mueve, qué hay que hacer. Lo hicimos con esa idea de vamos a hacerlo bien una vez en la vida, ahora que tenemos 40 pirulos. Nos pusimos ese plan y en eso estamos, aprendiendo. Yo me hice un curso con un galés que hablaba de la industria de la música, y al Mono lo empecé atomizar con esas cosas. Arrancamos a construir esto con esa idea de decir “vamos a jugárnosla a hacer algo bien una vez en la vida, haciendo la música que nos gusta en el idioma que sale y listo”.
Mono: Cuando me contactaste creo que me llamaste de una. Yo me acordaba de vos por las violas de la banda, que me habían gustado cómo sonaban, y me acuerdo que ese día no tenías tierra y te tiré un alargue en ese toque en que nos conocimos previamente. La banda de él tenía un sonido medio fightero y me había gustado. Y bueno, los dos escuchamos lo mismo.
SR: ¿El nombre de la banda tiene algún significado?
Christian: En un principio no había significado, era sonoridad nomás. Entramos a tirar nombres y era cualquier cosa. Y salió Vedas Toronado, que después fue adquiriendo un significado. Yo no creo mucho en las casualidades, soy medio volado en eso, para mí todo tiene una causa. El Vedas Toronado adquirió un significado porque es como un contraste, es un contraluz. El Toronado es un auto, un muscle car de los ’70, con tremendo motor, algo bien terrenal. Y los Vedas viene de lo que es el sánscrito hindú, que son los primeros textos, los más antiguos que hay escritos y que tienen toda una mística y una filosofía, y que van por un lado mucho más espiritual. Como el Toronado es algo bien terrenal, entonces era como conjugar dos cosas que parece que no pueden conjugarse, esa cosa espiritual, antigua y ancestral, con el Toronado que es la máquina a la que le echás 28.000 litros de nafta especial.
Mono: Es un auto muy especial el Toronado, y aparte tiene una historia. Como auto americano de tracción delantera, ellos lo odiaron al principio y después lo amaron. Ahí vi una similitud con nosotros, que somos latinos para ellos, y nosotros siempre pensando en tirar la música para el hemisferio norte, pero no por estar condenado a pensar que acá no lo van a apreciar.
Christian: Aparte el Mono es fierrero, entonces el Toronado se lo estudió de arriba abajo.
Mono: Hay uno solo en Uruguay, dentro de poco lo agarramos (risas).
Christian: Cuando empezamos a ensayar, en realidad yo agarré el bajo, porque venía con mi guitarrista.
Mono: Sí, a él lo metimos, porque en realidad arrancamos nosotros dos y después metimos al Fede, y vos arrancaste con el bajo.
Christian: Claro, y ya venía con el nombre traído. El proyecto lo empezamos a armar juntos y empezamos a darle cariño a la tipografía, que está buena y siempre me gustó. Viste que es como con las personas, Fulgencio puede ser un nombre feo, pero yo conocí a un Fulgencio que era el padre de una novia y era un genio, y ahora el nombre me encanta.
SR: ¿La banda tiene una propuesta específica?
Christian: La propuesta es ser fieles a lo que nos gusta. No hay un pienso de decir “vamos a hacer un tema que vaya por este lado”. Yo escribo temas todo el tiempo, pero son melodías, melodías sin letra. Hay gente que va con la letra y después arma la melodía, pero yo agarro la guitarra y me salen riffs y melodías. Y siempre sale con una onda, justamente, de lo que yo mamé. En realidad no hay en sí un planteo de decir “nuestra propuesta va a ser esto”.
Mono: Creo que no estamos casados con nadie y nos sale más espontáneo.
Christian: Hay temas que salen tipo baladitas, hay otros que salen más rifferos, más metaleros. Siempre estamos rondando ciertos estilos del rock alternativo, del hard rock, del rock clásico, del rock alternativo grunge. Es algo que se va rondando ahí, pero no es que estemos casados con algo.
Mono: Hay un salpicado, también. Mismo ahora que sacamos “A void”, que sería una balada, es la única canción que baja de esos BPM.
Christian: Sí, es tipo más baladita, pero es media progresiva.
Mono: Pero si querés bailotearla, se puede. Hay tremendo salpicado.
Christian: Ahora la que viene es punk rock.
Mono: Sí, pero los seis temas que están después, los que nos falta que la gente conozca aunque en vivo los hacemos…
Christian: Son medios stoner.
Mono: Sí, pero hay algunos que se ponen medios panterosos. Hay unos riff de los que ni siquiera armamos los temas, que hemos llegado a tocar juntos el trío de la cocina, Marcel, Christian y yo, que podemos ir a cosas thrasheras o doble bombo abundante.
Christian: Sí, sí, con un riff más hard rock, casi metal.
Mono: Nunca pasa tipo “vamos a hacer esto”, no es como que viene, va viniendo.
Christian: De los temas que hay, que sacamos, se nota que hay una diferencia.
Mono: Pero hay como una identidad sonora, por suerte, porque para mí eso está bueno, y si sale natural, mejor.
Christian: No suena forzado.
Mono: Nos pasaba con La Cosa, de la que puedo decir lo que sea porque somos fundadores de esa banda con otro amigo, que a veces sentíamos eso que estaba muy de moda, de venir forzando un ska, bajarlo a algo lento y después ir a un hardcore punk. Sentís que cuando sos más pendejo, inmaduro, los cortes los hacés abruptos.
SR: ¿El inglés es excluyente, por lo que vos decías, de alguna manera?
Christian: No sé si es excluyente, porque capaz que puede pasar que mañana pinte algo en español. No es algo que sea a rajatabla. No nos casamos con el inglés para nada. Por ejemplo, todas las bandas que tuve antes, eran todas composiciones en español. De hecho me gustan muchas cosas del rock en español, soy muy fanático de Divididos, de Catupecu Machu. Me gustan muchas propuestas nuevas que hay en el rock argentino y de acá también. Por ejemplo, Flor Sakeo me parece que está buenísimo lo que hacen.

SR: ¿Se ven dentro del panorama rock nacional como una banda más?
Mono: Yo creo que sí. Es un poco difícil de visionarlo porque nunca pasó, pero ¿por qué no?
Christian: A mí me encantaría; como proyección la idea era ésa. Sí, nos vemos dentro de la escena, porque no es excluyente estar dentro de la escena del rock uruguayo por estar en otro lado. La idea del proyecto es no achicarse. Cuando arrancamos el proyecto, yo se los mostré a muchos músicos, porque a mí me gusta el intercambio y no lo tomo a mal, al contrario, me parece súper nutritivo y bueno, y al Mono también. Lo mostramos medio por eso de ver si hay una validación, y hablé con muchos músicos. Muchos nos dieron recontra para adelante, pero de algunos yo me quedé con los comentarios más paleros, más negativos, porque esos son los que por ahí más nutren. Algunos dijeron: “¿Qué te vas a ir a pelear con los monstruos allá del norte, que tienen todo el veneno y que tienen todo el marketing alrededor?” Yo tomé ese comentario, pero creo que en Uruguay no podemos quedarnos con eso del paisito. Acá hay tremendos músicos que a nivel internacional tocan lo que quieren. Entonces ahí surgió un poco lo de la impronta de “¿por qué no?, vamos a tirarlo para el norte, para donde sea”. De hecho nos han escrito de radios de allá. El proyecto no es ni sacar Uruguay del partido ni quedarnos sólo acá.
Mono: El Pez, Andrés Martínez, es muy buen bajista y toco con él en La Cápsula, otra banda, y me dijo que estaba de más, que era for export. Está el caso de Hendrix, como pila más -aunque no puedo hablar de Hendrix porque es una bestia- o Nirvana, que se hicieron de renombre en Inglaterra y después eso va para atrás, vuelve a tu país y ahí te haces conocido acá. A veces pasa eso.
SR: En Uruguay pasa mucho.
Mono: Justamente, bandas que salieron y después la gente se da cuenta de que son uruguayas.
SR: Hay cuatro temas en Spotify de Vedas Toronado y todos suenan como si fuera una banda americana. ¿Cómo se logra eso?
Christian: Se logra con un estudio y un técnico al que vamos a mencionar, que es Jorge Cancela.
Mono: Y con Mezcal, que es un estudio de jingles.
Christian: Y tienen un fierrerío impresionante. El Mono es muy amigo del Coco y de Miguel García.
Mono: Buenos compresores, buenos pre, buenos micros. En lo que más nos concentramos fue en que la base y que la bata peguen y suenen. Le metimos todo a la bata, y después con el mismo pre al bajo, que van de la mano porque los grabamos juntos. Y las voces, que Christian canta como un hijo de la madre. Aprovechar eso, porque después las guitarras las terminamos grabando hasta en el baño. Justo esa parte es la que la hacemos más romántica, de abajo. Vamos a Mariscala, al medio del campo, en mi casa, en lo de Pedro Alemany, en lo del Tute. Las violas hoy en día, es más fácil: interfase, tirás un par de micros.
Christian: Hay como nueve pistas de violas.
Mono: Triplicadas naturales, pero con tres micros ya son tres pistas para todo, y ahí le buscás un sonido.
Christian: Lo importante para mí es que escribir y guardar es como la receta de la cangreburger de Don Cangrejo (risas).
Mono: A veces es con referencias en los mixs cuando hacemos la mezcla. Por ejemplo, con el tema “Plus ultra”, está bueno cuando escuchás una canción por influencia directa que ya es parte tuya esa música y decís que está nirvanera. Porque aparte los técnicos te preguntan si tenés alguna referencia a un tema que estás grabando.
Christian: El técnico, Jorge, justamente que es muy crack, se copó con el proyecto y la mano de él fue increíble, porque fue como un productor. “A ver, cantalo de nuevo, Titán”, me decía, “pero cantalo como más romántico”. O “acá metele más huevo”. Se colgó. Y para hacer las mezclas lo hemos dejado muchas veces solito, y nos manda la mezcla inicial y ya suena que decís: “¡Apa!”. Eso es porque se colgó mucho con el proyecto y es tremendo técnico, y aparte nos pide las referencias.
Mono: Lo bueno es llegar a la receta. Con Jorge tenemos hasta términos inventados por nosotros; por ejemplo, medio decibel es un pendejaime (risas). Me pongo a pensar realmente y ya tenemos como un sonido.
SR: Pero hay que nutrirlo, a su vez, con buenos temas. No alcanza con sonar bien.
Mono: Totalmente.
Christian: Exacto. Si los temas están, la receta está con el estudio y con Jorge, sin duda, y creo que con eso, nos casamos. Porque yo, particularmente de las bandas que he tenido y he grabado, nunca ninguna la hemos hecho sonar como sonamos con Vedas, ni a palos. O sea, el sonido que se logró parece como de otro lado.
Mono: Le metimos. Para mí, los miércoles religiosos fueron re importantes.
Christian: Igual los temas ya sonaban.
Mono: Sonaban solos. Me acuerdo que en las maquetas habíamos hecho los arreglos con guitarra duplicada y con bata electrónica, y sonaban. Yo estaba laburando en Estados Unidos y mandé una mezcla de tres pistas… y a lo último son 29 pistas.
Christian: Y sonaba bien, ya.
Mono: Cuando decimos 29 pistas, suena feo, pero en realidad ni siquiera se enciman. Hay una guitarra acústica y ¡le metimos piano!
Christian: Metimos producción.
Mono: Metimos un cello. Está bueno tomarse la molestia, porque es arte. Está bueno un disco que suene y está bueno defenderlo en vivo. También está bueno tener un sonido diferente en vivo; los temas son defendibles y los defendemos.
SR: Se ven bien sonando sobre el escenario, entonces.
Christian: Pueden faltar detalles, como ser el piano, pero son todos detalles que están muy atrás como sosteniendo a la banda. Aparte el bajo también hace un lindo laburo ahí atrás, que siempre el bajista es el que menos se nota como común denominador, pero hay un laburo lindo de bajo. Por ahora, así en crudo y de a cuatro, suena, suena.
SR: ¿Están apuntando a un disco? Hay cuatro temas en Spotify, y por lo que comentan, hay más.
Christian: Hay dos más prontos.
Mono: Si los mezclamos, la idea sería llegar a un EP de seis. Diez ya están producidos y se tocan en vivo. La idea es ponernos una meta, pero ya está hablado llegar al LP, con entre 10 y 12 canciones.
SR: ¿Van a publicar hasta seis temas para largar el EP, y después hasta 10 para el disco?
Christian: La idea era ir largando tema a tema, pero no cerrarlo ahora en un EP porque tenemos muchos temas. Es preferible largarlos en un disco. A veces es difícil por un tema de tiempo y de guita, pero podríamos llegar a decir que nos largamos igual a sacar un disco doble, porque mirá que temas hay como para hacerlo. Es un tema de ver el balanceo de tiempo y plata para poner.
SR: Están hablando de una edición física, ¿no?
Christian: Por lo menos conceptual, después física, veremos. El disco conceptual nos gustaría igual.
Mono: A mí me encanta eso de tener los vinilos, el CD.
Christian: Es lindo decir “tenemos un álbum”. Incluso está volviendo el cassette ahora, que me encanta.
Mono: La gente le llama retro y en realidad nunca murió. Los vinilos gruesos, de los buenos, te parten la croqueta.
Christian: Los graves, más que nada son otra cosa.
SR: Con un disco también es otra forma de presentarse al mundo, ¿no? Porque en Spotify hay millones de canciones.
Mono: Sí, creo que eso es importante, que esté el álbum, EP o LP, para mí le da como otra cosa. Está bueno lograrlo. Ahora capaz que lo que nos frena un poco es ese tema de de juntar la guita como para poder hacerlo en la calidad que lo queremos hacer, pero las canciones están. O sea que si alguien tiene plata y quiere invertir, queremos grabar, no somos caros. Estamos listos.
Christian: Yo también vengo de la época del álbum y me gusta.

SR: Para los que no escuchamos qué hay más allá de estos cuatro temas, ¿qué nos podemos encontrar en las próximas ediciones que van a lanzar?
Christian: Ahora vienen dos temas, uno es “Hell”. Las maquetas ya están y ya suenan.
Mono: Suenan rico las maquetas. A veces pasa que terminás de grabar la viola y al final terminás trayendo la de la maqueta (risas). La agarrás y la tirás para adentro de vuelta.
Christian: Ya sucedió eso.
Mono: Ha sucedido, es parte de la receta de Vedas.
Christian: Una tarjeta externa, un plugin, amplitud…
Mono: Capaz que eso se genera con la distensión de cuando estábamos él y yo grabando. Y bueno, “Hell” es un tema fuerte.
Christian: Medio punk rocker.
Mono: Sí, sí, totalmente.
Christian: Se van a encontrar con eso. Como hablamos, no vamos por el tema de, por ejemplo, clavarnos en 81 BPM. Y el tema que viene después es como un hard rock medio foo fightero. Se van a encontrar con cosas distintas.
Mono: Dentro de los otros temas que estamos tocando en vivo, hay otro que es punk rock.
Christian: Hay otro más para adelante.
Mono: “Yellow brain” es muy Alice In Chains, pero tiene una estridentidad… Hay de todo, una ensalada. Pero creo que nunca vamos a tocar un ska.
Christian: A mí no me gusta el ska. Lo que tiene es que mismo dentro de un tema podés encontrar bajadas de tempo, más variaditas, más para arriba. En sí, sin querer, también es como que a veces se tornan medios progresivos los temas, con muchas partes. Mismo “Void” tiene un montón de partes, y eso es identidad, nos sale así. Cuando fuimos a laburar un poco los temas con Bruno, que fue un amigo que nos produjo algunos temas, nos tiró algunos piques interesantes pero siempre llevados más a lo comercial. En algunas cosas transamos y en otras no, porque justamente no queríamos perder tampoco la identidad por sacar algo para que quedara más vendible. Entonces fuimos un poco por el medio en algunas cosas. Eso sí, en casi todos los temas se van a encontrar con muchas partes, que pueden ser cualquiera, el estribillo, un verso, una estrofa. Eso sí es parte de la cosa.
SR: ¿Las letras son sólo tuyas, Christian?
Christian: Sí, por ahora me toca a mí.
SR: ¿De qué hablan?
Christian: En general son muy metafísicas. Yo soy muy para ese lado y no me gusta darlo en bandeja, son muy sugeridas. Hay gente que me ha dicho que no se entiende nada, que es cualquier cosa. No, a mí me gusta así. Aparte yo mamé mucho también del rock en español, como Divididos, que escuchás y te preguntás de qué está hablando. Yo las entré a estudiar y están buenísimas, pero tenés que prestarle atención. Está el que quiere algo así, en su jeta, pero a mí no me gusta así. Va muy por el lado metafísico, hay temas sociales, si se quiere. No me meto en la política porque no me gusta mezclar eso.
SR: Hay mucho de Vedas para complementar el Toronado, entonces, de alguna manera.
Mono: Hay, sí, ahí va.
Christian: Hay mucho de Vedas, exactamente.
SR: Las letras son más Vedas y la música más Toronado,
Christian: Sí, porque la música empuja y lo otro está más para juntarse en el Uritorco. A mí me gusta ese viaje.
Mono: Son complementarias de las dos maneras.
SR: ¿Hay toques próximamente?
Christian: Tenemos planes varios. En Tazú en setiembre con alguna banda de acá y alguna de Argentina. Tenemos idea de ir para Argentina, estamos intentando cerrar allá. Ya hemos ido varias veces, pero queremos seguir yendo porque también es un lugar que está muy bueno para lo que hacemos nosotros y en general. Es un lugar espectacular, hay muchos boliches y mucha movida, entonces tenemos ganas. Tenemos puertas abiertas en un par de lugares, pero queremos enganchar con una banda que se sume para hacer fuerza.
Mono: La banda con la que estábamos vinculados se tomó una pausa ahora, pero estábamos en un intercambio. Nosotros fuimos para allá dos años seguidos con dos toques el primer año y uno en el segundo.
Christian: Tocamos en el Strummer.
SR: Hay planes, entonces.
Christian: Sí. Otro plan que tenemos ahora es con el bajista anterior, el Rengo López, que es tremenda gente y se quedó ahora un poco con las otras bandas que tenía porque se le abrió mucho el espectro. Él ahora toca con Frankie en los Hermanos Brother, y la idea es hacer una fecha también con los Brother más sobre fin de año, pues parece que se juntarían de nuevo. Ahora tenemos como bajista a Juan Ángel Rodríguez. El que nos siguió dando una mano mientras no conseguíamos bajista fue el Mono Vargas, que fue en realidad el que plasmó los bajos de Vedas y ya quedaron como la identidad. Después vino el Rengo y ahora está hasta Juancho.
Mono: Tuvimos una seguidilla con los bajistas. Mismo el Rengo tiene la familia, proyectos, de todo, y la banda demanda un poco, claro. Nosotros nos lo tomamos en serio pero con gusto.
Ariel Scarpa
