El Umbral sorprende al arranque de este año presentando su disco perdido, que consta de grabaciones realizadas entre 2010 y 2012. El trabajo recibió el nombre de Interferencias y se compone de 12 canciones más un bonus. La primera impresión es la importancia de esta recuperación del material disgregado en pistas y carpetas, dada la calidad de las canciones. Un aplauso para este esfuerzo que de pique tiene un montón de valor.

El Umbral mismo nos cuenta algunos detalles de este disco: “Aquellas sesiones de 2011 en el antiguo Inzen Estudio, contaron con la colaboración de Esteban Silva, poniendo a nuestra disposición partes de su batería, del técnico Javier Longhi caracterizado por ponerle la mejor de las ondas a todo lo que realiza, también de Marcelo Castellanos ayudándonos con la afinación de la batería”. “Las canciones “Envidia”, “Nunca pudiste olvidar” y “Juego sin final” contaron por aquellos tiempos con la ejecución de Jorge Carro en el bajo. También contó en esta etapa con voces adicionales a cargo de Nicolás Machado en “Señales”, “Nunca pudiste olvidar”, “Cuesta ver”, “Nosotros dos”, ”Igual” y “Envidia”. El texto original en la introducción de “Juego sin final”, es de Diego Capusotto, y la adaptación del texto es de Alejandro Núñez. La locución está a cargo de Matías Rivero”.

Las canciones que integran el disco son:

Señales / Nunca Pudiste Olvidar

Cuesta Ver / Un Día Difícil

Mucho Más / Rápido

Nosotros Dos / Tu Vida

Igual / Envidia

Resplandor / Juego Sin Final

Cuesta Ver (Bonus)

A pesar de ser grabaciones de distintos momentos, la calidad de los temas es muy pareja. De principio a fin, el disco suena excelente, con mucha potencia y hasta con bronca por momentos, si se quiere, intercalando otros climas. Es así que vamos encontrando canciones con toda la fuerza que la banda suele ejercer, como ser “Señales”, “Cuesta ver”, “Tu vida” y “Envidia”. En ellas la guitarra, el bajo y la batería atacan con su furia punk rockera. También hay melodías interesantes (“Nunca pudiste olvidar”, “Mucho más”, “Nosotros dos”, “Igual” y “Juego sin final”) no exentas de potencia, además de otras canciones con diferentes intenciones musicales (“Un día difícil”, “Rápido” y “Resplandor”) que abren las posibilidades de El Umbral sin que pierdan su sello identificatorio. Interferencias también cuenta con el agregado de una canción extra, convirtiéndose en el track Nº 13, y que es una diferente versión del clásico “Cuesta Ver”.

Una “puesta al día” de El Umbral que es bastante más que eso: es una entrega de una buena cantidad de grandes canciones que se agregan a su destacada discografía y que siguen sumando al acervo de la banda, donde las letras siguen teniendo su papel preponderante por los mensajes que se esfuerzan en transmitir. Un gran disco.

Ariel Scarpa