Tren Nocturno En Chains (16/4/22)

La pasada noche del sábado 16 del corriente mes, cerca de un centenar de seres humanos tuvimos el placer y como hacía tiempo que no sucedía, pudimos disfrutar de una noche a puro rock de la forma como nos merecemos. A partir de las 22 horas y de la mano de la banda nacional Tren Nocturno, en medio de una noche casi inhóspita de semana de Turismo en la ciudad de Montevideo, y particularmente en las instalaciones del local Chains, se dio cita ese combo extra apetecible de poca luz, mucho rock y variedad de bebidas.

Para no quedar como quien no se da cuenta de las buenas cosas de la vida, ya sea por distraído o porque la vorágine de la vida cotidiana te pasa por arriba, cuando éstas suceden es justo y necesario mencionarlas, recalcarlas y sobre todo aprovecharlas a sus anchas para el mejor goce posible. Y así, en un abrir y cerrar de ojos, uno se encuentra enfrentado al show que Tren Nocturno nos ofreció esa noche, donde de principio a fin y en una hora y media, la banda regaló toda su magia y logró que el público vibrara, cantara y se emocionara.

Gracias a una excelente puesta en escena de una banda que nos hizo recordar que gracias a su música podremos tirar abajo cualquier muralla, superar pandemias y dejar atrás el distanciamiento y los bozales para volver a sentir la emoción de la cercanía y el compartir un espacio unidos por una pasión común: una buena dosis del mejor rock posible.

La tarea emprendida por la banda, quienes se dedican a tributar a los viejos y queridos Guns N’ Roses, es un esfuerzo mancomunado de cinco sujetos dedicados a darte ese sonido duro y directo al pecho que logre hacerte saltar, cantar y abrazar al de al lado, sea éste conocido o no, ya que el motivo para hacerlo es simplemente compartir una misma pasión y que es el escuchar aquellos acordes de rock originarios de la banda norteamericana a la cual homenajean y que todos nosotros tanto queremos.

El conglomerado compuesto por Nicolás Pérez en la voz, Matías Lucero y Gastón Lemos en guitarras, Sebastián Fernández en el bajo y Martín Rodríguez en la batería, ejecutan a la perfección todos los temas que versionan del grupo americano. Es una frase repetida: “las comparaciones son odiosas”, pero claro, eso está dicho desde el lado del versionado, porque debe gustarle poco que otros sujetos puedan emular su obra. Y este es uno de esos casos; Tren Nocturno musicalmente no tiene nada que envidarle a los Guns. Por supuesto que podrás encontrar diferencias entre ambos, podría nombrase la cantidad de ceros en los saldos de las cuentas bancarias de unos y otros músicos, el metraje de sus viviendas, la cantidad de automotores de unos y otros o hasta la cantidad de damas con que algunos y otros anduvieron de parranda (aunque Nicolás, nuestro Axl, no se queda atrás dado la cantidad de chicas presentes esa noche atentas a él).

¡¡¡Pero, lector!!! ¡¡¡Atenti!!! Te invito a que repases el nombre de esta revista. Se llama: SÓLO ROCK. Entonces, lo que debemos resaltar es la parte musical de esta banda, y en cuanto a ese punto, son magníficos. De hecho, todos los ítems nombrados anteriormente no tienen nada que ver con el mundo de la música, es más, cuanto más aparecen, menos rock hay. Y sino, repasen la historia misma de los Guns y las consecuencias de la fama, las minas, la guita, etc., etc.

Volviendo a nuestra banda, su frontman demuestra una enorme capacidad vocal a la hora de ejecutar tanto los tonos agudos así como los graves de Axl, además de contagiar al público con entusiasmo, carácter y personalidad. La banda cuenta con muy sólidos músicos, donde sus dos guitarristas son muy técnicos y se acompasan de manera formidable. Para el caso de Matías Lucero en su rol de “Slash”, no pifea ni un acorde o nota y un patente ejemplo es su interpretación de “Sweet child o’ mine”, donde su versión es idéntica a la original. Tarea no menor tiene Gastón Lemos en su labor de guitarra rítmica, donde en forma impecable acompaña y agrega su aporte para el crecimiento del conjunto. El bajista marca el ritmo básico de las canciones siendo el pulso y corazón de la banda al dar un aporte constante de energía. Y el batero ejecuta a la perfección su tarea siendo un apoyo fundamental para el resto de los músicos a la hora de una adecuada interpretación de los temas.

Ha sido un privilegio participar de este evento donde gratuitamente y a cada instante te están pasando cosas y estás viviendo experiencias que no se obtienen tan fácilmente ni las comprás con el maldito dinero: con estos músicos obtenés un caleidoscopio de vivencias sólo logradas por un espectáculo de suma calidad.

Tomás Cámara