
Durante la segunda mitad de la década de 1980 y principios de la de 1990, Uruguay experimentó un florecimiento de la cultura fanzinera, impulsada por un contexto sociopolítico de apertura democrática y la efervescencia de la subcultura punk y postpunk. Estos fanzines, publicaciones autoeditadas y de bajo presupuesto, se convirtieron en una voz alternativa y un medio de expresión vital para jóvenes, inquietos, artistas emergentes y activistas.
Un Eco De La Transición Democrática
Tras años de dictadura, la recuperación de la democracia a mediados de los ochenta trajo consigo una necesidad imperiosa de libertad de expresión y una explosión de creatividad. Los jóvenes, en particular, buscaban canales para manifestar sus ideas, frustraciones y aspiraciones, al margen de los medios de comunicación tradicionales, que aún se ajustaban a los nuevos tiempos. Los fanzines emergieron como una solución ideal: accesibles, directos y sin filtros.
La Estética “Hazlo Tú Mismo” (DIY)
Inspirados por la ética «Do It Yourself» (DIY) del punk internacional, los fanzines uruguayos de la época se caracterizaban por su producción rudimentaria pero auténtica. Fotocopias, recortes de revistas, dibujos a mano alzada y textos escritos a máquina o a mano se combinaban para crear un estilo crudo y visceral. Esta estética no era sólo una limitación económica, sino también una declaración de principios: la democratización de la publicación y el rechazo a la perfección impuesta por la industria editorial.
Contenido Diverso y Temáticas Audaces
El contenido de estos fanzines era tan variado como las inquietudes de sus creadores. Se podía encontrar desde poesía experimental, cuentos cortos y manifiestos artísticos, hasta críticas de conciertos, reseñas de discos de bandas locales e internacionales, y opiniones sobre la escena musical underground. La política, la contracultura, la crítica social y la búsqueda de nuevas identidades también eran temas recurrentes, reflejando el espíritu contestatario de la época.
Fanzines Emblemáticos y Sus Aportes
Aunque muchos fanzines tuvieron una vida efímera, algunos lograron dejar una huella significativa. Si bien es difícil elaborar una lista exhaustiva debido a la naturaleza descentralizada y no registrada de estas publicaciones, algunos nombres que resuenan en la memoria de la época incluyen:
- “Gas”: Considerado por muchos como uno de los fanzines más influyentes de la época, “Gas” fue un referente para la escena punk y postpunk, con artículos sobre música, cultura y política.
- “El Viajero De Piedra Muerta”: Con una orientación más experimental y literaria,” exploró temáticas artísticas y de vanguardia.
- “Cable a Tierra”: Un fanzine que se sumergió en la cultura urbana y el acontecer de la ciudad, con un tono más periodístico y de crónica.
- Revista Sólo Rock: La primera publicación en agregar colores a sus tapas, eso daba un toque de originalidad sobre las publicaciones de la época, enfocada en difusión de bandas nacionales con entrevistas, fotos y crónicas de sus recitales, además artículos de corresponsales en el extranjero que nos ponían al tanto de la movida musical en Europa.
Estos y otros fanzines fueron cruciales para la difusión de la música alternativa uruguaya, dando visibilidad a bandas que de otra manera no habrían tenido espacio en los medios masivos. Además, sirvieron como plataformas para el surgimiento de nuevos escritores, ilustradores y pensadores.
La Comunidad Fanzinera: Un Espacio De Conexión
Más allá de las publicaciones en sí, los fanzines propiciaron la creación de una comunidad vibrante. Los intercambios de fanzines, las ferias autogestionadas y los encuentros informales en conciertos o bares fomentaron la interacción entre jóvenes con intereses afines, creando redes de apoyo y colaboración. Fue un momento de efervescencia cultural donde la autogestión era la norma.
Declive y Legado
Con el avance de los años ’90 y la llegada de nuevas tecnologías como internet, la dinámica de la autoedición comenzó a cambiar. Si bien los fanzines no desaparecieron por completo, su rol central como medio de comunicación underground se vio paulatinamente transformado.
No obstante, el legado de los fanzines uruguayos de mediados de los ochenta y principios de los noventa es innegable. Representaron un capítulo fundamental en la historia cultural del país, demostrando el poder de la autoexpresión y la creatividad en un período de profundos cambios. Fueron el eco de una generación que buscaba su voz, construyendo un espacio de libertad y experimentación que resonaría por mucho tiempo en la memoria colectiva del underground uruguayo.
Antonio Cruz


Excelente escritura e información siga adelante sr Cruz
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Gracias AMIGASO gran abrazo de Rock!!!
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